Los dibujos animados influyen en las preferencias alimenticias de los más pequeños

Cuando en un empaque de un producto alimenticio aparece la imagen de un personaje infantil, los niños se ven más tentados de consumir ese producto.

Los dibujos animados influyen en las preferencias alimenticias de los más pequeñ

Un estudio publicado en la edición de marzo de “Archives of Pediatrics & Adolescent Medicine” señala que los niños prefieren los cereales en cuyo envoltorio aparece su personaje animado favorito y cuando éste no aparece, escogen los que tienen menor contenido de azúcar, ósea son más saludables.

Es muy común en publicidad apelar a estos personajes para captar la atención visual de los niños y ayudarlos a identificar y recordar el producto en cuestión. El problema, es que generalmente este recurso se utiliza para promocionar alimentos poco saludables y de escaso valor nutritivo.

Los niños son muy sensibles a los estímulos externos y la publicidad se vale de ello, para promover sus productos poco saludables ya que al ponerlo junto con cierto personaje favorito de los más pequeños, éstos transfieren las cualidades positivas de ese personaje a dicho producto.

Un estudio publicado el año pasado realizado por la Universidad de Yale, halló que utilizar el personaje de Dora la Exploradora en los empaques de determinados productos alimenticios en los Estados Unidos, llevaba a que los preescolares (niños de entre 1 y 5 años, aproximadamente) escogieran alimentos poco saludables y gran contenido calórico en lugar de alternativas más sanas y nutritivas.

Ahora los investigadores buscaban averiguar si la asociación entre el producto y el personaje incluía también en el sabor del mismo, es decir, si la presencia de éstos en los envases influía de manera inconciente en la elección de tal o cual cereal.

Experimento

Para averiguarlo, los investigadores buscaron en los diferentes comercios cereales azucarados pero que contuvieran poca cantidad de azúcar, cuya oferta no estaba muy difundida. Así encontraron una marca de cereales llamada Clifford Crunch, que se comercializa sólo en las tiendas de alimentos integrales y no en otro tipo de comercios como supermercados por ejemplo.

Los empaques de estos cereales traen al personaje que da nombre al producto, “Clifford”; un enorme perro rojo, protagonista de una serie de libros y de un dibujito animado basado en ésta, dirigido a niños pequeños, transmitido por el canal Discovery Kids.

Para realizar su estudio, los investigadores realizaron un experimento para el cual tomaron estos cereales con bajo contenido de azúcar y los envasaron en cuatro nuevos empaques diferentes. Dos etiquetados como "Sugar Bits" (trocitos de azúcar) y dos como "Healthy Bits" (trocitos saludables). Uno de los nuevos envases, contenía en su exterior a Mumble y Gloria, los pingüinos de la película Happy Feet (muy conocidos entre los más pequeños).

A continuación, procedieron a mostrar uno de los cuatro envases a un grupo de 80 niños de entre 4 y 6 años de edad. Encontraron que a la gran mayoría de ellos les gustó el cereal, pero manifestaron mayor agrado por el que exhibía a los pingüinos en su frente.

Los hallazgos

Además, encontraron que los niños se inclinaban más por los cereales etiquetados como "Healthy Bits" (trocitos saludables); lo que indica según Matt Lapierre, autor principal del estudio y estudiante de doctorado en la Facultad Annenberg y Sarah Vaala, coautora y candidata doctoral de la Facultad de comunicaciones Annenberg de la Universidad de Pensilvania en Filadelfia, que los mensajes que promocionan hábitos alimenticios saludables están cumpliendo su cometido y están llegando a los más pequeños.

Pese a lo cual, la presencia en las cajas de cereal de los pingüinos influía más en los niños que el concepto de la alimentación sana. Lo que sugiere que la percepción del sabor del cereal se vio influenciada por la imagen de los personajes animados.

Sacar lo positivo de lo negativo

Si bien es muy común que las distintas marcas de productos alimenticios utilicen este recurso para promover sus alimentos poco saludables, Keri Gans, vocera de la Asociación Estadounidense de la Diabetes y autora del libro The Small Change Diet, sostiene que se puede sacar partido de estos hallazgos. Ya que si de acuerdo a los resultados del experimento los niños están comenzando a inclinarse por aquellos alimentos etiquetados como “saludables” y a su vez manifiestan preferencia por los que en sus envolturas exhiben personajes animados, utilizar este recurso para promover alimentos saludables. De este modo se estaría contribuyendo en alguna medida, a combatir el gran flagelo de estos tiempos: La obesidad infantil.