Buena alimentación infantil y ejercicios para los niños

Son la base para un desarrollo y crecimiento saludable.

Nutrición infantil

Una alimentación balanceada y la práctica regular de ejercicio físico son la base para que los niños crezcan y se desarrollen sanamente. Sin embargo, lamentablemente esto no siempre sucede así y en los últimos tiempo se ha incrementado el consumo de alimentos poco saludables y los estilos de vida sedentarios potenciados por la gran influencia de la televisión, los videojuegos y el Internet.

Algunos datos para tener presentes:

  • Aproximadamente 1 de cada 3 niños tiene sobrepeso y 1 de cada 6, de entre 6 y 17 años, obesidad
  • Tan sólo un 30% de los niños de entre 6 y 17 años realiza ejercicio físico diariamente (más de 1 hora)

Riesgos para la salud infantil de una alimentación poco saludable y la falta de actividad física:

  • Una alimentación inadecuada y el sedentarismo contribuyen a que los niños tengan sobrepeso y obesidad con todos los problemas para la salud física y mental que ello acarrea (problemas de autoestima) y el estigma social que implica
  • Los niños que reciben una alimentación con carencias nutricionales, tienen mayor riesgo de tener problemas de aprendizaje y de comportamiento, trastornos de ansiedad, depresión, etc.
  • La alimentación inadecuada y el sedentarismo al favorecer el sobrepeso, potencian también la aparición en la adolescencia, sobre todo en las niñas, de trastornos alimentarios (bulimia, anorexia) vinculados con la imagen corporal que exige la sociedad actual

Beneficios de una buena alimentación y de la práctica de ejercicio físico

  • Para la mente
    • Una alimentación equilibrada es fundamental para el sano desarrollo del cerebro y del aprendizaje
    • Una alimentación sana y la práctica regular de ejercicio favorecen el buen desempeño escolar, mejora la autoestima, disminuye las posibilidades de desarrollar ansiedad y depresión
    • Los buenos hábitos alimenticios y la realización de deporte en la niñez es posible que favorezca estas costumbres saludables durante la adultez
  • Para el cuerpo
    • La dieta de los niños requiere de una gran variedad de nutrientes, vitaminas, minerales, carbohidratos, grasas, etc., para su correcto desarrollo, crecimiento y protección inmunológica
    • La práctica regular de ejercicio físico favorece el desarrollo de una musculatura más tonificada, fortalece los huesos y ayuda a controlar el exceso de peso previniendo el sobrepeso y la obesidad
    • Una dieta saludable y equilibrada y la práctica de actividad física regular previenen la aparición de enfermedades crónicas en la adultez, relacionadas con la obesidad como la diabetes, la hipertensión, los problemas cardíacos, entre otras

Algunas recomendaciones para mejorar los hábitos alimenticios de los más pequeños:

  • Comenzar el día con un buen desayuno que incluya lácteos, frutas, cereales y grasas, ya que supone ¼ de las necesidades nutricionales de los más pequeños y previene futuros problemas de sobrepeso y obesidad. Ya que si los niños desayunan mal es más factible que a media mañana o medio día tengan hambre y coman alimentos poco saludables como galletitas, snacks, papas chips, etc.
  • Ofrecer una alimentación variada y equilibrada. El organismo humano precisa 40 nutrientes para estar saludable, por lo cual es muy difícil que si la dieta se limita a pocos alimentos y siempre los mismos, no se cubran esas necesidades
  • Ofrecer frutas y verduras a los más pequeños ya que contienen nutrientes, vitaminas esenciales para la salud y la prevención de múltiples enfermedades
  • Predicar con el ejemplo: Los padres son el modelo para los niños e influyen directamente en sus comportamientos. Por ello, para enseñar hábitos saludables de vida, tanto buenas costumbres alimenticias como realizar regularmente actividad física, debe trasmitirse desde la práctica y no sólo desde la teoría