Refrigerios saludables para los más pequeños

Opciones nutritivas, ricas y divertidas para las colaciones de los más chiquitos de la casa.

Refrigerios saludables para los más pequeños

Brochetas de fruta

Los niños suelen aburrirse de comer la fruta en rodajas, cubos o enteras y por ello muchas veces se niegan a hacerlo. Esta opción de las brochetas de fruta es una alternativa súper original y divertida, ya que a ellos les llaman mucho la atención este tipo de cosas a la vista y por simple novelería las aceptarán.

Obviamente que la fruta es un refrigerio muy nutritivo y saludable para los niños y es muy importante que la incorporen como parte de su dieta diaria, ya que aporta fibra, vitaminas, antioxidantes y además es práctica y fácil de trasportar como merienda

Cortar en cubos pequeños trozos de ananá, melón, durazno, frutillas a la mitad, queso con bajo contenido en grasa, uvas y colocar en un palillo para brocheta combinando los colores las frutas de manera divertida y atractiva a la vista de los niños.

Batidos

Los batidos de fruta son exquisitos, muy saludables, nutritivos y a los más pequeñitos les encantan. Combinar leche o yogurt natural o ambos, con frutas como bananas, fresas, duraznos y licuar durante algunos minutos. El resultado será un riquísimo batido de frutas con mucho aporte de calcio, proteínas y vitaminas; ideal para los niños en desarrollo.

Edamame

Edamame es una preparación gastronómica que consiste en hervir en agua y sal, vainas de soja inmaduras, es un refrigerio muy sano y sabroso para los niños, fuente de fibra, proteínas, calcio, magnesio y ácido fólico. Pueden comprarse congeladas en los grandes supermercados o tiendas de comida china, ya que son un plato típico de oriente.

Helados de fruta

Lavar y tener siempre frutas congeladas, por ejemplo, frambuesas o fresas, realizar un puré con ellas, agregar un poco de jugo de granada, crema de leche batida y algo de azúcar. Servir con algunas fresas o frambuesas frescas. Así se obtendrá un refrigerio saludable, rico en fibra, calcio y proteínas.

Palitos crocantes de pan con queso crema y semillas

Colocar en un recipiente queso crema con semillas de sésamo, de girasol, almendras trituradas y servir junto con palitos crocantes de pan. De este modo los niños mojarán el palito en el queso con los demás ingredientes y obtendrán un bocadillo delicioso y nutritivo.

Globos de mantequilla de maní

Colocar ½ taza de mantequilla de maní (o queso crema), miel, avena, ½ taza de leche descremada y formar bolas. A continuación colocar cereal en una bolsa molerlo un poco e ir colocando de a una las bolas dentro de la bolsa para que se recubran con el cereal molido. En heladera duran hasta 5 días y son un bocadillo de alto valor proteico.

Tortillas o pionono arrollado

Ya sean tortillas o pionono, puede rellenarse con diversas y saludables opciones, por ejemplo queso crema, aguacate, queso cheddar rallado, zuchinni rallado y morrón rojo. Otra alternativa es queso fresco, tomate y albaca.

Sándwiches con formas

Una interesante y divertida alternativa de presentar los sándwiches a los más pequeños es utilizar un molde cortante de los que se utilizan para galletas con formas por ejemplo de estrella, media luna, etc., y cortarlos una vez que ya han sido rellenados con el relleno elegido.

Paté de garbanzos

Este paté de garbanzos es una opción ideal para untar en tostadas, galletitas, etc. Se prepara procesando juntos los ingredientes hasta que quede una mezcla suave y homogénea. Estos son: 1 lata de garbanzos, 1 diente de ajo, 1 cucharada de aceite de oliva, 2 charadas de jugo de limón, semillas de sésamo, sal pimienta y condimentos a gusto que pueden incluir: Perejil, cilantro, comino, entre otros.