Metacrilato aplicado a la estética

Se utiliza en objetos como parabrisas, piezas informáticas, electricidad, instrumentos musicales, muebles, y algunos otros, pero lo que nos ocupa aquí es el uso específico que se le da al Metacril en la medicina estética, y que tan seguro es

El metacrilato
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¿Qué es el Metacrilato?

“Producto de polimerización del ácido acrílico o de sus derivados. Es un sólido transparente, rígido y resistente a los agentes atmosféricos, y uno de los materiales plásticos más utilizados”.

A priori, y guiados por su definición, no parece ser una sustancia que quisiéramos tener dentro de nuestros cuerpo, sin embrago, parece que, el Metacrilato o Metacril es una sustancia cada vez más utilizada en medicina estética.

Básicamente es plástico, el más transparente de todos, con un 93% de trasparencia, es muy resistentes a los rayos del sol, al punto que no demuestra envejecimiento luego de 10 años expuesto a la intemperie, resiste entre 10 y 20 veces más que el vidrio, pero es bastante más liviano que éste, buen aislante térmico y también de sonido.

Por otra parte es altamente combustible, arde aún fuera del fuego, pero tiene la ventaja de no expulsar gases tóxicos, se vende generalmente en planchas de las que hay disponibles numerosos colores y calidades, se raya muy fácilmente de modo que se vende con una cubierta protectora. Se utiliza en objetos como parabrisas, piezas informáticas, electricidad, instrumentos musicales, muebles, y algunos otros, pero lo que nos ocupa aquí es el uso específico que se le da al Metacril en la medicina estética, y que tan seguro es.

Su uso estético

La aplicación de Metacril es considerada una técnica permanente dentro de la medicina estética, es decir que se hace una vez y sus resultados son para siempre. No es una técnica invasiva, el Metacril se inyecta en puntos determinados por debajo de la piel. Su efecto provoca generación de más colágeno y células alrededor de las partículas de Metacril, y genera relleno, fibrosis y encapsulación.

Por ejemplo, se emplea en el relleno de arrugas, se inyectan las bolitas de Metacril mezcladas con colágeno, a lo largo de la arruga, el organismo absorbe el colágeno y el cuerpo naturalmente envuelve todo aquello que le es desconocido, y crea una masa de tejido conjuntivo, alrededor de las minúsculas bolitas que terminan por rellenar la arruga. Se inyecta más profundamente que el colágeno, ya que podrían quedar pequeños bultitos visibles, y es necesario realizarse una prueba de alergias antes de inyectase.

Además de rellenar arrugas, se utiliza también para relleno de labios, dorso de manos, eliminar la apariencia de piel de naranja que produce la celulitis, y también para aumentar el volumen del pene y de los labios vaginales. En todos estos usos se ha observado que las contraindicaciones son, enrojecimiento pasajero de la piel, formación de pequeños nódulos en los puntos de inyección y, lo más importante a tener en cuenta, es que si los resultados positivos son permanentes, de haber resultados negativos, también lo serán.

Pero hay una aplicación más que, por sus fallas, ha despertado dudas acerca de que tan nocivo, o no, puede ser el uso de Metacrilato como relleno para determinadas partes del cuerpo, esta aplicación es la inyección de Metacrilato para aumentar y endurecer las nalgas.

Efectos nocivos del uso del Metacril

En los últimos tiempos se han dado casos de mujeres que, luego de haber utilizado esta técnica, han sufrido dolores, se han tenido que someter a operaciones para intentar quitar el Metacril y algunas han muerto. Es el caso de la modelo y ex Miss Argentina, Solange Magnano, que se inyectó Metacril para eliminar la apariencia de la celulitis. Lo que parecía una tontería se complicó y acabó con una embolia pulmonar que la llevó a la muerte, a los 38 años de edad. Hay en la Argentina algunos otros casos de problemas post inyección, como el de la modelo Paula Volpe, pero afortunadamente no tan terminantes.

Por que no inyectarse metacrilato

Muchos profesionales de medicina estética se muestran indignados ante la proliferación de estos procedimientos ambulatorios, que sólo requieren del pago de la tarifa para ser realizados y que muchas veces acaban con consecuencias tristísimas.

Parece ser que el problema estaría en las cantidades de Metacril utilizadas. Los especialistas parecen coincidir en que el Metacril que se inyecta en un fluido aceitoso que no es malo en pequeñas cantidades, es decir, para rellenar por ejemplo una arruga, en el caso de aumentar el tamaño de las nalgas requiere, obviamente, de cantidades muy superiores, que por otra parte y por su propia consistencia aceitosa, tiende a deslizarse hacía los miembros inferiores, alcanzando los vasos sanguíneos y provocando trombosis, que luego repercutirán en la carótida o el corazón dando como resultado la muerte.

Es muy importante investigar muy bien antes de realizarse cualquier tipo de operación, implante, inyección o antes de tomar algún fluido mágico que nos devuelve la belleza y juventud perdidas, sí es cierto, que la medicina estética nos ayuda a ser jóvenes por más tiempo y eso no es malo, solamente que no debe volverse una obsesión, un objetivo a alcanzar pagando cualquier precio, incluso con la muerte.