Las fotos de bellas modelos pueden transmitir mensajes ambiguos

Por un lado pueden bajar la autoestima por la insatisfacción con el propio cuerpo y por otro estimular para alcanzar ese anhelado estándar de belleza.

Las fotos de modelos pueden transmitir mensajes ambiguos

Prácticamente todas las mujeres están en algún momento de sus vidas desconformes con alguna parte de su cuerpo. Las morochas quisieran ser rubias; las de pelo enrulado, lacias; las que tienen la cola pequeña, tenerla más grande; las que tienen busto pequeño quisieran ser más voluptuosas; las más rellenitas, ser más delgadas y viceversa.

Es una constante la insatisfacción y el anhelo femenino de realizar algunas transformaciones en el cuerpo (algunas posibles otras no tanto, puesto que la estructura corporal muchas veces no admite cambios, las caderas son un claro ejemplo de ello, los husos no pueden ser modificados) que las hagan ver más bellas.

Esta disconformidad responde en gran medida a que los estándares de belleza poco se ajustan a la realidad de las mujeres comunes, las que se ven a diario por la calle, en el supermercado, en el autobús, etc. Muchas de las modelos son bulímicas o anoréxicas, la gran mayoría de las personalidades del espectáculo o la moda se han sometido a numerosas intervenciones quirúrgicas y tratamientos estéticos para verse así, es decir como aparecen en las portadas de las revistas, además claro está del Photoshop que les da el último retoque que necesiten para verse impecables.

Estudio de la psicóloga Laurie Mintz de la Universidad de Missouri

Pero pese a saber todo esto, muchísimas mujeres se sienten mal luego de hojear las páginas de las revistas donde aparecen hermosas mujeres con cuerpos esculturales. Así lo demostró un estudio efectuado por la profesora de Psicología de la Universidad de Missouri, Columbia, Laurie Mintz, en el que se realizó un test a 91 mujeres blancas de entre 18 y 31 años.

Parte de este consistía en calificar la conformidad de las participantes con 35 partes de su cuerpo con una puntuación del 1 al 5. Y se halló que después de ver por unos minutos (entre 1 y 3) imágenes de mujeres bellas, la disconformidad de ellas se incrementó considerablemente, sobre todo en aquellas que previamente se sentían insatisfechas con su físico.

Opinión de los nutricionistas

Por su parte, algunos nutricionistas han comprobado que las imágenes de mujeres bellas de las revistas, ejercen una fuerte influencia en la valoración que muchas mujeres tienen sobre si mismas. Ya que tanto las que tienen sobrepeso como las que tienen un peso normal, reacción ante estas fotografías valorando negativamente sus propios cuerpos, por sostener que está muy lejos de alcanzar ese ideal de mediadas perfectas de las modelos. En tanto la autovaloración de las mujeres delgadas, incluso con bajo peso, se incrementa con las mismas imágenes.

Estudio de investigadores de la Universidad Estatal de Ohio

Según un estudio publicado en la revista Media Psychology, realizado por investigadores de comunicación de la Universidad Estatal de Ohio, las fotos de mujeres esculturales expuestas en las revistas de moda, pueden emitir mensajes ambiguos, contradictorios sobre la valoración del propio cuerpo, ya que pueden, por un lado, deprimir a quien las ve por no aproximarse siquiera un poco a ese paradigma de belleza, o estimular a la autosuperación física en pos de alcanzarlo o aunque sea aproximarse a él.

Según los investigadores, algunos estudios previos, como por ejemplo, los anteriormente mencionados, señalan que aquellas personas que no se sienten a gusto con sus cuerpos, se sienten aún peor al ver imágenes de personas hermosas con cuerpos perfectos.

Este estudio analizó las reacciones de 169 mujeres jóvenes mientras miraban fotografías de modelos en una revista online. Hallando que aquellas que estaban descontentas con su cuerpo, pasaban menos tiempo mirando las imágenes, a no ser que estuvieran acompañadas de publicidades que incitaran al lector a hacer cosas para verse mejor (dieta, ejercicio, etc.).

Silvia Knobloch-Westerwick, profesora asociada de comunicación de la Universidad de Ohio señaló, que muchas publicaciones o programas de televisión intentan incitar a su público a tener determinadas conductas a fin de parecerse a esos ideales de belleza que en ellos se muestran, entrenamiento físico, dietas, tratamientos estéticos, etc.

Según ella esa es la clave para lograr que el público consuma estas imágenes pese a que puedan ser contraproducentes; si la persona siente que siguiendo los consejos que las acompañan pueden verse como esos anhelados paradigmas de belleza, las consumirán y se estimularán con las mismas, para conseguir el objetivo de parecerse un poco a éstos.

Conclusión

En conclusión las imágenes de personas hermosas con las que se busca proclamar un determinado ideal de belleza desde los medios masivos de comunicación, parecerían tener más efectos negativos que positivos en algunas personas. Puesto que la implementación de publicidad de clínicas estéticas, suplementos dietarios, cremas reductoras, etc., que las acompañan, no es más que un recurso de marketing, de publicidad que lo que busca es que esas personas que no consumen el producto por sentirse mal al ver esas imágenes, lo sigan consumiendo, alentadas muchas veces por publicidad un tanto engañosa.