Raquitismo

Es un trastorno común entre los niños y se caracteriza por la debilidad ósea.

Raquitismo infantil
Foto cortesía de facmed.unam.mx

El raquitismo es un trastorno que se caracteriza por la debilidad ósea con descenso de las sales calcáreas, lo que produce que los huesos se quiebren con mayor facilidad. Es más habitual en los niños de entre 6 y 24 meses, ya que se produce durante el período de crecimiento óseo y en esa etapa sus huesos crecen rápidamente.

Corren mayor riesgo de padecer raquitismo los niños que:

  • Son de piel oscura
  • No se exponen moderadamente a la luz del sol
  • No consumen alimentos que contengan calcio, fósforo y vitamina D
  • Durante la lactancia materna no reciben complementos de vitamina D

Causas

La causa principal de la mayoría de los casos de raquitismo es la ausencia de vitamina D, pero también hay factores hereditarios. La vitamina D contribuye a que los huesos puedan absorber el calcio y el fósforo de los alimentos. Cuando el niño no recibe suficiente vitamina D, no obtiene los nutrientes que necesita para fortificar sus huesos y estos se debilitan

Otras causas pueden ser la presencia de enfermedades infecciosas, mala alimentación o ausencia de exposición al sol luego de los 6 a 12 meses.

Síntomas

  • Dolor o sensibilidad en los huesos
  • Ablandamiento de los huesos que dependerá de la edad del niño
  • Disminución del tono muscular (fundamentalmente del abdomen que se presenta flácido y distendido
  • Tendencia a las fracturas
  • Cierre tardío de la fontanela
  • Inquietud en la noche
  • Aumento de la fiebre en la noche
  • Calambres musculares
  • Deformidades en el esqueleto: deformidades en la pelvis; piernas arqueadas; deformidades de la columna; protuberancias en la caja torácica; cráneo asimétrico
  • Anomalías dentales: formación tardía de los dientes; dolor en los dientes; defectos estructurales en los dientes; mayor incidencia de caries
  • Crecimiento insuficiente, lento en niños de 0 a 5 años

Diagnóstico

Para realizar un diagnóstico el médico evaluará los antecedentes genéticos, la dieta y salud general del niño. Realizará examen físico, análisis de sangre, rayos X en piernas y brazos.

Tratamiento

El tratamiento a seguir dependerá del tipo de raquitismo del niño. El causado por deficiencia, carencia de vitamina D, se trata administrando dicha vitamina diariamente. Pasados dos meses de iniciado el tratamiento, las alteraciones esqueléticas, las deformaciones óseas, etc., comienzan a desaparecer y mejorar; así como el dolor y la debilidad de los músculos.

En los casos de raquitismo hereditario o a causa de alguna enfermedad, deberá consultarse a un especialista en el tema.

Cuando el raquitismo ha ocasionado deformaciones puede ser necesaria la utilización de dispositivos ortopédicos o cirugía correctiva.

Prevención

La mejor manera de prevenir el raquitismo en el niño es controlar que reciba suficiente cantidad de calcio y vitamina D. Al bebé que es amamantado el pediatra le indicará un suplemento de vitamina D, ya que la leche materna contiene una cantidad muy pequeña de vitamina D. En los casos de aquellos bebés alimentados con leche de fórmula y reciban menos de 450 gramos diarios, también necesitarán suplemento.

La exposición al sol es buena para absorber la vitamina D, pero es importante recordar que esta no debe ser directa en niños menores de 1 año (si que estén al aire libre), y en los mayores deben extremarse los cuidados antes de exponerlos al sol.