Tips para madres primerizas

Pedir ayuda cuando se necesita, descansar cuando duerme el bebé, dejar de lado la preocupación por el peso, etc.

Consejos para madres por primera vez

Cuando la flamante mamá tiene el bebé en los brazos por primera vez y se va a su casa con su pareja y el recién nacido, comienza una vida llena de cosas nuevas, un mundo por conocer. Como suele decirse habitualmente. Nadie nace sabiendo ser padre. A ser padre se aprende con la práctica y la madre primeriza tiene mucho por aprender de su pequeño recién nacido.

  • Pedir ayuda

  • Cuando se tiene un bebé recién nacido, todo el tiempo y la atención de la madre está puesta en él y puede que no tenga tiempo para cocinar, lavar la ropa, realizar las tareas de la casa e inclusive, muchas veces ni siquiera para ir al baño. Por ello, es importante que la flamante mamá pueda pedir ayuda cuando la necesita al papá, a las abuelas y abuelos, tíos, amigas, etc. Ellos, seguramente, estarán gustosos de ayuda y la aliviarán mucho.

  • Evitar recibir muchas visitas los primeros días
  • Los primeros tiempos en casa con el bebé, suelen ser muy complicados y si a eso se le agrega la visita permanente de familia y amigos, el resultado es una madre totalmente agotada. Por ello, aunque pueda resultar difícil es preferible decirles con delicadeza a las personas que quieren venir a visitar que lo dejen para más adelante o dosificar las visitas de modo que no resulte tan demoledor para la mamá y el bebé.

  • Dormir cuando duerme el bebé

  • Este es un consejo muy recurrente y escuchado, pero muy acertado. Las horas de sueño son un debe en las madres de recién nacidos y son muy necesarias. Por ello, es importantísimo dormir y descansar todo lo que se pueda, cunado se pueda y dejar para después las tareas de la casa y demás.

  • Fomentar el vínculo con el bebé

  • Es fundamental el contacto de la piel de la madre con la del bebé, que él sienta su olor, su voz, su calor. Así comienza a formarse un vínculo muy importante que se mantendrá de por vida.

  • Dejar de lado el exceso de peso y la obsesión por recuperar la figura

  • Es demasiado pronto para preocuparse por el cuerpo, el post parto lleva un tiempo y es necesario que transcurra para que éste se recupere y vuelva a lo que era antes del embarazo. Amamantar ayuda mucho a perder peso, por lo cual dar de mamar a demanda, es lo mejor y alimentarse bien y sanamente es fundamental para la recuperación.

  • Pedir ayuda si se tienen problemas con la lactancia

  • Si bien la lactancia es algo natural y cuasi instintivo, ya que al acercar el pezón a la boca del bebé, instintiva y automáticamente se prende a éste y comienza a succionar; si no se coloca bien el pezón lo puede lastimar y esto traerá muchísimos problemas posteriores. Por ello, se puede recurrir a la maternidad donde nació el bebé, donde seguramente hay personas especializadas en lactancia que pueden apoyar a la flamante mamá y enseñarle a colocar el pezón y a amantar más cómodamente a su bebé.

  • Aprender a identificar su llanto

  • Los primeros días seguramente la reciente mamá acudirá de inmediato ante el primer llanto del bebé, pero con el transcurso de los días aprenderá a identificar a que corresponde cada llanto y responder en consecuencia cuando es hambre, frío, malestar, etc.