Mi pareja no le pone límites a su ex

Existen determinadas circunstancias que pueden provocar que las rupturas amorosas sean dolorosas e incluso traumáticas. Y si las cicatrices no se cierran bien y quienes están involucrados no pasan del todo la página, estas relaciones previas pueden significar un problema en las relaciones futuras. Hay ocasiones en que las relaciones amorosas no se cierran del todo porque una de las partes no quiere que así sea. Si has sentido alguna vez que tu pareja no establece los límites que debiera en su relación con su ex, entonces debes tener una idea de lo que estamos hablando.

Esa relación pasada se convierte en un lastre que puede dañar tu relación amorosa. Puede que te sientas invadida, que no entiendas por qué tu pareja no se decide a poner los límites necesarios o que sientas que tu relación se tambalea sin que ninguno de los dos haga algo.

Sabemos que la intromisión de una ex novia en la relación es una situación difícil de manejar y puede sacar tu lado más inseguro. Por ello, debes mantener la calma y dejar los celos a un lado. Si existe una solución y las dos partes quieren ponerla en marcha, entonces no habrá problema alguno. Lo fundamental para resolver cualquier crisis es que los dos involucrados mantengan la calma, se comuniquen, transmitan sus miedos y sensaciones y lleguen a un acuerdo para buscar la mejor solución.

Esto significa que no debemos aplicar soluciones por nosotros mismos y sin contar con nuestra pareja porque se trata de un tema que compete a ambos. Tampoco es bueno imponer restricciones y prohibiciones a nuestra pareja, pues con ello solo conseguiremos tapar el problema y agravarlo posteriormente.

Habla con tu pareja

Dentro de una pareja cada una de las partes tiene antecedentes distintos, ha vivido experiencias distintas y tiene preocupaciones diferentes; por lo que es posible que cada uno se moleste por unos y otros aspectos y, en este caso, aunque tú veas clarísimo que la expareja de tu novio se ha convertido en un problema para tu relación, es muy posible que la otra parte no se haya percatado de ello.

Lo que sí es cierto es que tú no has vivido la relación que tu pareja y su ex han vivido y, aunque eres libre de opinar, no debes entrometerte en su relación. Por el contrario, es tu novio quien debe decidir, junto contigo, qué demandas va a satisfacer y qué límites va a establecer. En ese sentido, conocer los antecedentes sentimentales de tu pareja es muy positivo porque te puede ayudar a entender su forma de actuar y pensar en muchas situaciones y conocerlo mucho más.

Por eso es fundamental que te intereses por su pasado y preguntes sobre todo aquello que quieras saber o sobre lo que tengas alguna duda. Por lo que, si tienes la sensación de que la relación que guarda tu compañero con su ex se ha convertido en un problema para tu relación, trata de hablar con tu pareja y averiguar con tranquilidad si sigue sintiendo algo por ella y si entiende por qué tú te sientes de esa manera.

La posibilidad de protegerte

Aunque no es así en todos los casos, en ocasiones los hombres mantienen la relación con su exnovia para evitar el conflicto. Y aunque no es la situación idónea para ninguno de los dos, esta manera de actuar evita que tú tengas un conflicto abierto con ella, lo que sería aún más difícil de manejar. Si es así, la buena intención de tu pareja es una virtud que deberías valorar.

Por otro lado, si tu pareja está todavía unida a su ex por un matrimonio, deberás ser paciente y entender que es un enlace difícil de romper, no solo en el plano sentimental, sino también en el legal. Una ruptura matrimonial supone que una relación sentimental se convierta en una relación de coparentalidad. Si, además, tu pareja tiene hijos en común con su pareja anterior, debes respetar el espacio de los niños, entender las demandas de la madre de los hijos y comprender que cada persona debe encontrar sus fronteras y respetar las del resto.

No busques conflicto

Puede resultar complicado, pero si quieres resolver el problema lo mejor es que ambos hablen con tranquilidad. Trata de no alterarte o atacar a tu pareja cuando hablen del tema. De ser así, él podría interpretar que simplemente estás celosa y no alcanzar a entender lo que realmente supone para ti este problema. No es malo que le transmitas tus dudas e inseguridades. Tu pareja debe estar ahí para lo bueno y lo malo y debe ayudarte a superar esos miedos poniendo de su parte cuando sea necesario.

Trata de ser empática

No te dejes llevar por el enojo y trata de ponerte en el lugar de ambos. Es comprensible que tu pareja, aunque haya terminado esa relación, no quiera hacerle daño a su ex, menos aún si está pasando por una situación delicada, si es así, debes entender la situación en la que se encuentra su exnovia. Es posible que los motivos por los que no haya superado esa relación anterior sean la intensidad de sus sentimientos o unas circunstancias emocionales difíciles.

Todos hemos pasado por una ruptura dolorosa tras la cual ha sido difícil romper el nexo con nuestra expareja. Estos sentimientos son normales y, aunque hay que solucionar el conflicto, tenemos que entender por qué existen esos sentimientos. Evita caer en una guerra con la otra parte, por ejemplo, mandando indirectas por las redes sociales o publicando fotos con la intención de mandarle un mensaje a él. Cuando estamos enfadados tendemos a hacer cosas de las que luego nos podemos arrepentir. Mantenerte impasible antes los ataques de otros ayuda a mantener la mente clara, de manera que actuamos en consecuencia.

Si no hay solución

Si hablar con tu pareja y tratar de llegar a un acuerdo no ha funcionado, no deberás obligarla a que haga lo que no quiere hacer ni deberás tomarte la justicia por tu mano. En esta situación tu papel se limita a transmitirle a tu pareja tus preocupaciones y miedos y en poner de tu parte para encontrar una solución. Si después de esto tu novio no responde como crees que es justo y no entiende lo que sientes, entonces deberán plantearse si todavía quieren seguir juntos.