Los 10 peores zapatos de mujer para los pies
Los tacones altos, los estiletos, producen callos, dedo martillo y dolor en pies, piernas y espalda
Los tacones altos, los estiletos, producen callos, dedo martillo y dolor en pies, piernas y espalda
Los pies llevan el peso de todo el cuerpo y muchas veces no se les da la relevancia que se merecen. En pos de la moda y la elegancia las mujeres usan zapatos que deforman sus pies y producen problemas y dolores en la espalda. Entre los zapatos que más inconvenientes traen están:
Tacos altos
Según el cirujano ortopédico Pedro Cosculluela del Hospital Metodista en Houston, un 39% de las mujeres usa diariamente zapatos de tacón y un 75% de ellas tiene algún tipo de problema en los pies: Juanetes, callos, dolores, dedo martillo, etc. El Dr. Kelly Geoghan, del Mercy Medical Center en Baltimore explica que los tacos de más de 10 centímetros producen inestabilidad e incrementan el riesgo de sufrir una torcedura o esguince en el tobillo.
Zapatos pequeños
Los zapatos pequeños no permiten que el pie se apoye íntegramente y por ello aparecen dolores en los pies, las piernas y también en la espalda. El pie debe apoyarse con comodidad desde la punta del dedo mayor hasta el talón. Las sandalias con tiras finas, por ejemplo, no permiten un buen agarre del pie y además pueden lastimarlo con la fricción.
Zapatos grandes
Es un gran error el pensar que un zapato más grande que la talla del pie resultará más cómodo. Lo cierto es que el pie necesita sostenerse bien para poder llevar el peso del cuerpo. Un calzado grande no otorga una sujeción segura al pie y éste se ve forzado a realizar un gran esfuerzo para que el zapato no se salga y además
Zapatos en punta o estiletos
Como no permiten que el pie calce correctamente y favorecen la aparición de juanetes, callos, dedo martillo. Además al ser tan estrecho adelante, no dejan que la sangre llegue a los dedos y éstos se adormecen.
Ojotas
Si bien son muy cómodas y usadas en las épocas de calor, carecen de soporte para el arco del pie y al estar los dedos al descubierto hay riesgos de lesiones y heridas, explica la Dra. Kelly Geoghan, del Mercy Medical Center de Baltimore.
Balerinas
Este tipo de calzado, denominados así por la similitud con las zapatillas de ballet no tienen arco, son muy bajas y su forma adaptable al pie puede resultar incómoda para las personas con dedo martillo o juanetes.
Birkenstock
Si bien estas ojotas parecen ser muy cómodas, tienen un grave problema su frente tiene mayor altura que el resto del calzado lo cual hace que se ejerza una presión excesiva en el tendón de Aquiles lo que puede favorecer el dolor en el talón o la fasciitis plantar.
Suecos (zapatos sin talón)
Este tipo de calzado hace que se ejerza un esfuerzo extra en la parte de la punta del pie, lo que puede llevar a la aparición de dedo martillo o contracturas en los dedos.
Calzado de lona
Este tipo de calzado no tiene arco, es muy bajo y flexible. Pero hay algunas marcas que los elaboran con arco, anatómicos y con una suela gruesa.
Calzado deportivo
Hay una gran variedad de este tipo de calzado, pero el problema suele ser que se usa cualquiera para cualquier tipo de deporte o todo tipo de actividad y eso no es correcto. Hay calzado deportivo especial para correr, para jugar futbol, practicar basquetbol, hacer tenis, aeróbicos, etc.