Desprendimiento prematuro de placenta

El desprendimiento prematuro de placenta, es un trastorno que puede variar en cuanto a su gravedad, ya que la placenta es el órgano que alimenta al bebé durante todo su desarrollo. Su separación parcial o total puede causar inconvenientes serios que deben ser revertidos a tiempo.

Causas posibles que ocurra el desprendimiento de placenta aunque no científicamente comprobadas:

• Lesión debido a una caída o accidente en la zona del abdomen
• Cordón umbilical corto
• Pérdida del volumen del útero (una de las causas para que esto ocurra es la pérdida de líquido amniótico de modo súbito y repentino)

Cuáles son los factores de riesgo que pueden influir:

• Madre mayor de 38 años
• Consumo de drogas, alcohol o tabaco
• Diabetes
• Presión arterial alta
• Partos anteriores
• Amniocentesis
• Bloqueo epidural

Cómo se puede dar cuenta la futura madre de que algo anda mal:

• Dolor en el abdomen
• Malestar de espalda y cintura agudos
• Sangrado vaginal
• Náuseas
• Mareo y sensación de desfallecer
• El feto se mueve menos en el vientre materno
• Calambres
• Contracciones uterinas permanentes

El especialista explorará a la madre y uno de los tratamientos posibles es la administración de líquidos y transfusión de sangre. El control a partir de ese momento debe ser estricto y frecuente para no ocasionar imprevistos indeseados.

Cuáles son los tipos de desprendimiento:

• Pequeño: Se produce cuando se presenta un pequeño sangrado, calambres y algunas contracciones. El médico recomendará reposo absoluto si la gestación se halla en los primeros meses. Si por el contrario ocurre durante el final, es altamente probable que se produzca una cesárea
• Medio: Los síntomas anteriores se reiteran con más intensidad y se puede presentar sufrimiento fetal, ya que la frecuencia cardiaca del bebé puede disminuir. Si la gestación recién comienza, el médico, tras evaluar la situación, recomendará descanso y transfusiones sanguíneas
• Total: Es el más grave, pero no se presenta con asiduidad. La tensión de la madre se desequilibra, las hemorragias son abundantes y la madre debe ser rápidamente hospitalizada

Algunos datos a tener en cuenta:

• Según el libro Manual Merck de Información Médica para el Hogar, esta patología ocurre entre un 0,4 por ciento y un 3,5 por ciento de los alumbramientos
• Muchos de los casos mejoran notablemente si se siguen las indicaciones médicas correspondientes al comienzo del embarazo y se toman las debidas medidas de precaución
• Este problema se presenta en la mayoría de los casos en mujeres multíparas

¿Se puede prevenir el desprendimiento?

A pesar de que hay factores que no pueden evitarse para prevenir esta complicación, sí hay muchas maneras de que no aparezca:

• Evitar la ingesta del alcohol, tabaco y demás drogas
• Descansar lo suficiente
• No abusar del ejercicio físico ni intentar llevar a cabo todas las actividades cotidianas como antes del embarazo
• Solicitar la colaboración del entorno, ya que es muy importante tener un respaldo con el que poder contar, mucho más si se debe permanecer en reposo

Existen complicaciones que resultan ser severas si no son tratadas a tiempo, mucho más en los casos en los que la placenta se desprende en su totalidad. Algunas de ellas son:

• Presencia de coágulos
• Hemorragia que no se puede controlar
• Muerte fetal