Lenguaje corporal - Entrevista laboral: Segunda Parte
Llevarse objetos a la boca, una sonrisa débil, mantener la cabeza agacha, etc., son gestos desfavorables.
Llevarse objetos a la boca, una sonrisa débil, mantener la cabeza agacha, etc., son gestos desfavorables.
Continuando con la entrega del uso del lenguaje corporal en beneficio propio, para transmitir una buena impresión durante una entrevista o reunión de trabajo, la segunda parte:
Sentarse correctamente
La postura es importante tanto de pie como al permanecer sentada. Estar sentada con la espalda derecha, la cabeza en alto, transmite mucha más seguridad y confianza. El estar encorvada, con los brazos caídos o con las manos sosteniendo la cabeza, da la sensación de aburrimiento, incomodidad, malestar.
Sonrisa
La sonrisa dice mucho de la persona y los expertos sostienen que una sonrisa tímida y entre dientes puede transmitir inseguridad y falta de confianza, mientras una amplia e intensa, confianza, seguridad y amabilidad.
Llevarse objetos a la boca
No sólo es muy desagradable sino que además lo que transmite no es positivo. Ya sea llevar el lápiz, los lentes o lo que sea durante una charla de trabajo, puede ser interpretado como inseguridad y desconfianza en uno mismo.
Cabeza agacha y manos en los bolsillos
Ya se mencionó en la primera parte, que la postura con la cabeza erguida y el anda enérgico era lo que transmitía energía y confianza. Por lo tanto hacerlo con la cabeza agacha, las manos en los bolsillos y con un andar lento, se interpreta como preocupación, problemas, transmite sensación de derrotismo.
Mover los dedos de las manos y los pies permanentemente
En una reunión o entrevista de trabajo, estos gestos pueden ser interpretados como ansiedad, inquietud, nerviosismo y no son favorables.
Juguetear con objetos
Jugar con la pluma, una carpeta, golpetear los dedos sobre la mesa, etc., mientras transcurre la entrevista es bastante contraproducente. Puede reflejar inseguridad y además generar irritación en el otro como consecuencia de la desconcentración que genera la reiteración de dichos movimientos.
Parpadeo constante
El constante parpadeo durante una charla, genera sensaciones desfavorables. Si bien es una acción automática, no voluntaria y casi imperceptible, puede ser malinterpretado y hacer desconfiar. Inquieta al que está en frente y además puede denotar nerviosismo.
Imagen personal
Es sabido que al presentarse a una entrevista laboral o reunión de trabajo, el aspecto personal debe ser prolijo. Pero ello no quiere decir maquillarse, ni usar joyas, de la misma manera que se hace para un evento nocturno. La sobriedad conjugada con la elegancia son la clave. No recargarse de maquillaje, alhajas, ni llevar faldas muy cortas ni blusas escotadas.
Realizar alguna anotación mientra el otro habla
En una conversación mientras el otro habla, el foco de atención debe estar centralizado en escuchar atentamente lo que dice y realizar alguna anotación, aunque sea importante, puede ser percibido como falta de atención. También puede cohibir al que tiene la palabra, cortar o hacer olvidar una frase o pensamiento importante.
Frotarse el ojo con el dedo índice
Ya se dijo que las manos deben permanecer alejadas de la cara. El frotarse el ojo puede dar la impresión de sueño o de dudas con respeto al discurso que se está enunciando.