Gráficas de crecimiento infantil ¿Para qué sirven? ¿Qué es el percentil?
Los gráficos de crecimiento infantil tienen por finalidad, el proporcionar una medición evolutiva del crecimiento de los bebés y niños en el proceso del crecimiento, conforme los estudios que muestran pesos, tallas y perímetro craneal estimativo, considerando así un parámetro de desarrollo “normal”, de acuerdo a valores mundiales.
La utilidad de estos gráficos obedece a la necesidad de conocer cuál es el desarrollo normal que debe presentar un bebé, por lo que se utilizan guías organizadas por edades, pudiendo de esta forma identificar problemáticas asociadas a la falta de desarrollo específica según la diferencia existente con los gráficos dados.
¿Por qué es importante revisar los gráficos de crecimiento?
Con la cantidad de niños que han nacido con problemáticas inherentes a:
- Un mal cuidado durante el embarazo
- Problemas de tipo hereditarios
- Enfermedades durante el primer período de vida pasado el nacimiento
Se debe mantener un estricto control del desarrollo del bebé conforme van pasando los meses y años, pudiendo de esta forma, reaccionar ante cualquier problema identificado gracias a los gráficos de crecimiento.
Con la intención de medir el estado de salud y bienestar general de los niños, desde el nacimiento hasta una edad avanzada, se creó la referencia internacional del crecimiento, ello encargado a un grupo que encontraba su respaldo en la Organización Mundial de la Salud (OMS), estableciendo de esta forma desde 1990, un estándar que permite contar con una curva evolutiva válida, para verificar “cómo crecen los niños”.
El criterio anteriormente mencionado es reformulado hace poco tiempo, pues ahora se estima que la necesidad de tener gráficos de crecimiento proviene del saber “cómo crecen los niños”, y esto gracias a la muestra internacional que se toma de distintas fuentes étnicas, utilizadas con evaluaciones antropométricas y funcionales.
Si bien es cierto, no es posible conocer el estado de salud o bienestar general con los gráficos de crecimiento, sí se puede presumir un cierto estado de salud a partir de la concreción de procesos fisiológicos propios del crecimiento, y es ahí donde se encuentra valor a estos gráficos, pues hace posible la verificación de metas sanitarias, en aspectos generales. De esta forma no se debe pensar que los gráficos de crecimiento son el único indicador del bienestar del bebé, sino muy por el contrario, entender que actúa a modo de “vigía” del normal desarrollo del niño, conforme la sociedad en la que vive (lugar).
¿Cómo se utiliza la gráfica de crecimiento infantil?
Los resultados de los parámetros utilizados en la gráfica de crecimiento infantil (peso, talla, perímetro craneal), conforme con la edad del bebé se entregan en resultados percentiles, intentando con ello buscar un contraste con la media establecida como normal.
Los rangos de normalidad están circunscritos en medidas 3, 19, 25, 50, 75, 90 y 97, siendo el 50 la media. La interpretación de lo anteriormente señalado, muestra que un bebé que tiene un percentil de 50, pesa o mide lo mismo que el 50% de los niños de su misma edad.
Son considerados valores “normales”, todos los aquellos que concuerdan con un margen de percentiles entre 3 y 97, pues según las estadísticas en las que se basan estos parámetros internacionales, al menos el 3% de los niños puede tener peso bajo o mayor al normal, sin dejar de ser por eso un bebé normal.