Yoga para bebés
Es una actividad muy recomendable para todos los niños, pero muy especialmente para aquellos que son hiperactivos, padecen parálisis cerebral, Síndrome de Down, entre otras patologías
Es una actividad muy recomendable para todos los niños, pero muy especialmente para aquellos que son hiperactivos, padecen parálisis cerebral, Síndrome de Down, entre otras patologías
El yoga tiene múltiples beneficios tanto para adultos como para niños y bebés, ya que ayuda a adquirir más flexibilidad, movilidad, concentración, relajación, a aflojar los músculos, las tensiones y a tener un mayor control sobre el cuerpo. Es una actividad que puede utilizarse a modo de estimulación temprana. Si bien es aconsejada para todo tipo de bebés y niños de todas las edades, está particularmente indicada en algunos casos específicos como:
- Hiperactividad (los ejercicios de respiración practicados en el yoga hacen que se distienda, se relaje y ayudan a desarrollar la concentración)
- Síndrome de Down
- Hipotonía (problemas en el tono muscular)
- Disfunciones del sistema nervioso
- Parálisis cerebral
- Retraso en la adquisición de habilidades motoras
Entre los ejercicios de yoga recomendados para bebés están:
Con una música suave de fondo y en un ambiente tranquilo y propicio, la sesión puede comenzar realizando suaves masajes en los pies del bebé, logrando un primer acercamiento y contacto inicial que favorece mucho el vínculo. Estos ejercicios pueden ser realizados por los padres en la casa, pero es preciso que previamente sean instruidos por un profesor de yoga que les enseñe como realizarlos.
- Bicicleta
- Rodillas flexionadas contra el pecho
- Extensión de brazos
- Extensión de piernas
- Puente
- Flexionar y rotar tobillos
- Flexión de columna vertebral
Es un ejercicio que consiste en mover las piernas como si se estuviera andando en bicicleta (pedaleando). Entre los beneficios que otorga, están: Tonificar los músculos de las piernas, aumentar la circulación sanguínea, mejorar la coordinación motora, favorecer la expulsión de gases e impedir el estreñimiento.
Acostado boca arriba se llevan las piernas flexionadas hacia el pecho. Este ejercicio favorece la eliminación de gases por lo cual disminuye los dolores de barriga (cólicos) del bebé y mejora la elasticidad de rodillas y caderas.
Consiste en poner el dedo pulgar dentro de la mano del bebe para que éste lo agarre y se sujete con fuerza y así mover sus bracitos extendiéndolos. Este ejercicio otorga fuerza en los miembros superiores del cuerpo y aumenta la coordinación motora.
Acostado boca arriba flexionar y estirar las piernas del bebé. Este ejercicio fortalece los músculos abdominales y los muslos. Además ayuda a alongar los músculos aductores y traseros de las piernas.
Este ejercicio fortifica los muslos, glúteos y las lumbares, elongándolos al igual que las articulaciones de la cadera.
Tomar el pie del bebé y realizar suaves movimientos circulares y para adelante y atrás, moviendo su tobillo primero hacia un lado y luego hacia el otro. Este ejercicio fortalece y flexibiliza los tobillos y pies y favorece la formación del arco del pie.
Acostado boca arriba tomar las piernas del bebé, flexionarlas y llevarlas hacia un lado y el tronco para el lado opuesto, repetir hacia el lado inverso. También tomando las rodillas flexionadas moverlas en suaves movimientos circulares masajeando la zona lumbar. Este ejercicio trabaja la musculatura de la espalda contribuyendo a eliminar las tensiones de esa zona, estimulando los nervios de la columna por lo cual resulta ideal para aquellos bebés con disfunciones del sistema nervioso.