Cambios en el cuerpo de la mujer a partir de los 30
Se cae más el pelo, se sube de peso, se pierde masa muscular…
Se cae más el pelo, se sube de peso, se pierde masa muscular…
A partir de los 30 años comienzan a producirse algunas modificaciones en el cuerpo de la mujer, algunas de las cuales se traducen en cambios físicos como aumento de peso, cambios en la piel, en el pelo, etc.
Comienza a caerse más el cabello
A partir de los 30 años comienza a perderse el 1% del cabello.
Pérdida de la sensibilidad auditiva
Después de los 30, a consecuencia de la disminución de las células receptoras del oído interno, hay una pérdida gradual de la sensibilidad a los sonidos agudos. La música fuerte de los auriculares, por ejemplo, puede provocar zumbidos en los oídos.
La piel luce más apagada y pierde elasticidad
Comienzan a aparecer o acentuarse las líneas de expresión y a perderse la luminosidad y lozanía de la piel. Con el envejecimiento la piel pierde su elasticidad y esto se traduce en flacidez.
Las arterias y los pulmones pierden elasticidad
Disminuye la capacidad aeróbica debido a que se reduce la cavidad torácica. También se endurecen las arterias y pierden la elasticidad.
Aparecen manchas en la piel
Las manchas oscuras en el dorso de las manos, los brazos, cuello, y cara pueden volverse más frecuentes tras la exposición solar
Se produce el adelgazamiento del esmalte dental
El esmalte dental se desgasta y comienza a verse la dentina. Además también cambia el color de los sientes y sus bordes se aplanan.
Se sube de peso y se redistribuye la grasa hacia la zona abdominal
Después de los 30 la mayoría de las mujeres aumentan unos kilos. Y después de los 40 – 45 la grasa se redistribuye al abdomen. Hasta ese momento las grasas se localizan en piernas y glúteos para la lactancia, pero a medida que pasa la etapa de fertilidad, la grasa comienza a redistribuirse hacia la zona abdominal.
Comienza a perderse masa muscular
Esto se traduce en una mayor flacidez en las piernas y los brazos, ya que al aumentar la grasa corporal aunque se mantenga la masa muscular se pierde tonicidad. Lo ideal es hacer ejercicio físico con regularidad y llevar una dieta equilibrada que permita mantener un peso saludable, sin estar subiendo y bajando constantemente.
Hay una pérdida de la densidad ósea
Debido a la disminución de estrógenos propia de la menopausia, se produce una pérdida de la densidad ósea lo que favorece la osteoporosis, los problemas y fracturas en los huesos.
Cambios hormonales
Después de los 35 algunos cambios hormonales premenopáusicos que comienzan a aparecer alterar el humor y producen ansiedad y trastornos del sueño.