Consejos para mejorar la lactancia

La lactancia estrecha el vínculo madre - hijo y hace de ese un momento sublime para ambos

Lactancia materna
Foto cortesía de Daquella Manera

Como es sabido, no hay mejor alimento para el bebé durante sus primeros 6 meses de vida, que la leche materna. La lactancia materna establece un vínculo muy especial entre la madre y su hijo, los estrecha intima y afectivamente.

Además, es un alimento siempre disponible, esterilizado y a la temperatura justa. El equilibrio perfecto de proteínas, hidratos de carbono, grasas, sales minerales, vitaminas, hierro, etc. Es un alimento de fácil digestión para el bebé y que lo protege de infecciones respiratorias, digestivas y alergias. Y por último, una más de las tantas ventajas de la lactancia materna: Incentiva el desarrollo motor y sensorial más precoz.

Cómo saber si el bebé está siendo amamantado correctamente

  • Si se lo escucha tragar, es porque está mamando bien
  • Si se muestra satisfecho y duerme
  • Si duerme tranquilo y por períodos largos>
  • Si moja al menos unos 6 pañales al día
  • Si su deposiciones son amarillas, fluidas y frecuentes

Algunos problemas que pueden surgir en la lactancia

  • Si el bebé rechaza el pecho una sola vez, seguro que por algún motivo en ese momento el bebé no quiere comer, pero si esto se repite en reiteradas ocasiones, habrá que consultar al pediatra
  • Cuando vomita, pude deberse a: Si vomita poco en el lapso de una hora después de comer, es probable que sea porque comió apurado. Si aumenta de peso, los vómitos podrían deberse sólo a que comió mucha cantidad y apurado. Pero si baja de peso o no aumenta, seguramente se está alimentando mal. Y si vomita demasiado, hay que consultar al pediatra
  • Hay bebés que son muy lentos para mamar y ello puede deberse a que el bebé está muy abrigado. Es necesario consultar al pediatra, ya que el bebé pase mucho tiempo en el pecho, no significa que todo ese tiempo se esté alimentando

Para tener en cuanta

  • El calostro (primeras secreciones que produce el organismo materno al nacer el bebé) por más insignificante que parezca, es la concentración justa de alimento que necesita el bebé en esa etapa
  • Todas las mujeres están preparadas para amamantar. Sólo en situaciones excepcionales, no lo está, pero es el médico el que lo indicará en tal caso
  • El tamaño de los pechos no incide en la producción de leche. Los pechos pequeños tienen la misma capacidad de producción que los grandes
  • La producción de leche depende de la frecuencia e intensidad con que el bebé mame, cuanto más tome más leche se producirá
  • Amamantar no estropea los pechos. Los modifica temporalmente
  • Dar de mamar no tienen que resultar doloroso. Si hay dolor es porque algo no anda bien y se deberá consultar
  • El que la madre se encuentre ansiosa o preocupada, puede hacer que produzca menos leche. El estado anímico de la madre, incide directamente en la producción de leche
  • Es conveniente evitar mirar la televisión, escuchar la radio, o realizar cualquier otra actividad mientras se está amamantando. Es necesario que ese momento sea exclusivo para la atención y dedicación del bebé
  • El tomar mucho líquido no aumenta la producción de leche. Es bueno que la madre tome algo cuando tiene sed, pero ello nada tiene que ver con producir más leche. Lo único que aumenta la cantidad de leche, es la estimulación de la mama a través de la lactancia
  • Los dichos del tipo: “Mi leche no sirve, no alimenta a mi bebé, no lo satisface”. No son ciertos. No existen leches buenas ni malas. Cada madre produce la leche que su bebé necesita