Desarrollo de un embarazo de 11 semanas
La apariencia del bebé es cada vez más humana, su corazón late muy fuerte y se mueve enérgicamente, como pez en el agua, entre el líquido amniótico
La apariencia del bebé es cada vez más humana, su corazón late muy fuerte y se mueve enérgicamente, como pez en el agua, entre el líquido amniótico
Ahora, todos sus órganos y estructuras se han desarrollado y se hacen cada vez más visibles debido al crecimiento que han tenido. Produce sus glóbulos rojos y sus riñones comienzan a producir orina (principal componente del líquido amniótico). La madre se siente mejor, los malestares han disminuido y de a poco recobra su apetito, a la vez que crece su vientre.
Edad gestacional
El feto tiene ahora 9 semanas de vida, es decir que su edad gestacional es de 9 semanas.
Tamaño del bebé
Su tamaño es de 1.75 pulgadas (43 mm), es decir 4,3 cm, aproximadamente, de largo desde la cabeza a la cola.
Analogía del tamaño del bebé
El tamaño del feto dentro del útero es similar al de un higo.
Peso del bebé
Su peso en la semana 11, es de entre 7 y 10 gramos aproximadamente.
Tamaño de la panza, altura uterina
La altura uterina (distancia del hueso púbico a la parte más alta del útero) comienza a tomarse a partir de la semana 20 del embarazo. Se mide en centímetros y tiene correlación con el número de semanas de embarazo. Por ejemplo, a la semana 24, la altura uterina, aproximada, es de entre 22 y 24 cm. De a poco, la madre tal vez tenga que empezar a usar ropa más holgada, sobre todo a la altura de la cintura y la cadera. No es conveniente que nada se ajuste demasiado al vientre y tampoco a las piernas si existen várices.
Estudios aconsejados para esta altura del embarazo
Durante las primeras semanas, los estudios y análisis que se realizan, son para saber del estado de salud de la madre al comienzo del embarazo. La ecografía de Translucencia Nucal, se hace a partir de la semana 10 y hasta la 14. Consiste en la medición del Pliegue Nucal del feto, para descartar un posible Síndrome de Down. Los controles de peso, presión arterial, exploración y ultrasonido, se hacen en cada consulta ginecológica, que hasta alrededor de la semana 28, son una vez por mes.
En la semana 11, si se trata de un embarazo de riego, es posible que se indique una biopsia corial para analizar los cromosomas fetales.
Síntomas en la embarazada
Los malestares típicos de las primeras semanas del embarazo van desapareciendo de a poco, aunque esto depende de cada mujer. La mayoría recobra su apetito y comienza a ganar peso.
El feto se mueve permanentemente dentro del útero pero aún falta para que la madre perciba esos movimientos. El útero ha crecido bastante, abarcando la mayor parte de la pelvis y los senos también han aumentado mucho su volumen.
Algunos de los cambios que se pueden notar en esta etapa son: incremento del flujo sanguíneo que circula por el organismo (por ello es probable que se marquen más las venas), mayor sentido del olfato (se potencia considerablemente), oscurecimiento de los pezones, mayor producción de saliva con un retrogusto un tanto metálico, mayor sudoración. Algunas de estas modificaciones pueden resultar un tanto molestas, pero son absolutamente normales.
El incremento de peso en el primer trimestre del embarazo, es de, aproximadamente, entre uno y dos kilos y medio. Es aconsejable realizar alguna actividad física y entre las más recomendadas se encuentran caminar y nadar.
El desarrollo físico del bebé a las 11 semanas del embarazo
El feto adquiere cada vez una apariencia más humana, aunque su cabeza sigue siendo muy grande en relación con su cuerpo. Su esqueleto está creciendo con rapidez y los huesos se están solidificando, pero su piel sigue siendo translúcida. Los órganos y las estructuras se hacen más visibles debido al tamaño que han ganado.
Mueve sus piernas, salta rebota, se estira, tiene movimientos muy fluidos que a medida que aumente de tamaño empezarán a ser percibidos por la madre. Comienza a producir glóbulos rojos y sus riñones orina, que será, de aquí en más, el principal componente del líquido amniótico.
Aunque sus genitales externos se están desarrollando, son muy similares los de la niña y el varón, no haciéndose notoria la diferencia sino hasta la semana 14. Si bien el corazón del bebé late hace semanas, a partir de ahora lo hará con más fuerza y se podrá oír en la consulta a través del Doppler. Y a pesar de que no se escuche, el feto puede tener hipo dentro del útero materno.
Complicaciones frecuentes en la semana 11 del embarazo
Entre las complicaciones más frecuentes en el primer trimestre del embarazo, están: el aborto espontáneo, la hiperemesis gravídica y el embarazo ectópico.
El aborto espontáneo, es la pérdida del embarazo antes de las 20 semanas, en un 80% de los casos se da dentro de las 12 primeras semanas del embarazo. La hiperemesis gravídica, es cuando los vómitos son excesivos (más de lo habitual) y se prolongan más allá de las primeras semanas. Este trastorno que afecta a alrededor de 300 embarazadas, puede causar serios problemas nutricionales a la futura mamá, con las consecuencias consiguientes hacia el feto. Por último, el embarazo ectópico (se da en 7 de cada 1000 mujeres) es cuando se implanta el huevo fuera del útero (en la Trompa de Falopio) y el desarrollo del embarazo no es viable.
Aspectos psicológicos de la madre y su entorno
En esta semana, todavía la futura mamá puede estar aturdida y desconcertada ante la noticia de su embarazo, aún cuando éste haya sido planificado. Una conjunción de sentimientos se apoderan de ella, miedos, angustia, preguntas, etc. Todas emociones absolutamente normales en una mujer embarazada.
Puede ser que por momentos, una inmensa sensación de felicidad la invada y al rato una gran amargura y angustia se hagan carne en ella. Es posible, incluso, que durante las primeras semanas le cueste creer realmente que está embarazada. A muchas les pasa (sobre todo a las que no tienen malestares) que hasta que no se les nota la panza o se hacen la primera ecografía y ven a su bebé, no creen que están embarazadas.
Los cambios hormonales además, son grandes responsables de los cambios de humor de la futura mamá. Por ello, es importante que el entorno familiar (pareja, familia, amigos) entienda que la embarazada está atravesando por un período de extrema sensibilidad e intente apoyarla y animarla. Ya que el bebé y la mamá están conectados y todas las emociones de ella son transmitidas a él.
Es fundamental que dentro de lo posible, la embarazada esté tranquila, feliz y relajada. De modo que esa sensación de paz y placer sea transferida al bebé, para que crezca y se desarrolle en un ambiente confortable y placentero.