Tips para comunicarse con los hijos

Abrir muy bien los oídos y escuchar todo lo que tienen para decir es el puntapie inicial para una buena y sana comunicación

Comunicación familiar

La comunicación juega un rol fundamental en la relación entre padres e hijos, los une, fortalece el vínculo, etc.

No existe algo así como una forma correcta o una receta mágica para comunicarse con los más pequeños, cada caso es único y cada familia tiene sus costumbres, sus dinámicas, sus creencias. Pero lo que jamás deben faltar son las ganas, el interés, el darse el tiempo para hablar y, sobre todo, escuchar a los hijos que seguramente tienen cosas importantísimas y valiosísimas para decir y de quienes sin dudas tenemos mucho para aprender.

Algunas sugerencias para la comunicación con los más pequeños

  • Escuchar atentamente cuando los niños hablan y reflexionar sobre lo que dicen. Darse el tiempo para dejar lo que se está haciendo y prestar atención a lo que dicen nuestros hijos
  • Si estamos haciendo algo sumamente importante que no podemos dejar para después, explicárselo con tranquilidad, paciencia y pedirle que nos conceda un ratito para terminar lo que estamos haciendo y luego dedicarnos de lleno a ellos
  • Propiciar espacios de charla, por ejemplo en la cena (apagando la televisión) o antes de ir a dormir, mientras se les lee un libro, son buenos momentos para entablar una conversación con los más pequeños
  • Cuando se acercan con alguna pregunta incómoda (sobre sexualidad por ejemplo) o que no sabemos responder, es preciso sentarse con ellos y explicarles con términos acordes a su edad y entendimiento. En caso de no tener respuesta a lo que nos preguntan, decirles que no sabemos pero que vamos a averiguar y tomarse el trabajo de buscar la información. Hoy a través de Internet puede conseguirse muchísima información y material que ayude a responder esas dudas. Es fundamental que el niño tenga confianza en sus padres y si ellos le mienten o no dan respuesta a sus preguntas más tarde o más temprano dejarán de acudir a ellos para evacuar sus dudas
  • Ser siempre muy honesto con las respuestas a las preguntas de los niños y demostrarse abierto a hablar sobre cualquier tema, fortalecerá la confianza de éstos hacia sus padres. Es importante que los niños sepan que tienen libertad para hablar y preguntar a sus padres todo aquello que necesiten o quieran saber
  • Ser muy pacientes. Los tiempos de los adultos no son los mismos que los del niño, ellos no piensan ni construyen aún las frases a la velocidad nuestra, pero no debemos anticiparnos a responder antes de que terminen de formular la pregunta, porque esto no los ayuda. Escuchar pacientemente lo que tienen para decir respetando sus tiempos, los ayuda a pensar y a saber que nos importa mucho todo lo que tienen para decirnos
  • Volver sobre temas delicados o complejos cada vez que sea necesario. Hay algunas cuestiones que no resultan del todo fáciles de entender sobre todo para los más pequeños, por ello por más que ya hayamos tocado el tema, cada vez que el mismo surja dedicarle el tiempo necesario, ya que los niños más chicos asimilan sólo una parte de la información que se les da por vez, así que cada vez que se toque ese tema, irá asimilando nuevos datos

La comunicación con los hijos es algo sumamente importante como para no brindarle la suficiente importancia y trascendencia que se merece, es preciso que como padres nos demos el tiempo y les demos a ellos el tiempo y el lugar para escucharlos y hablar de lo que les está pasando, lo que les preocupa, les inquieta, lo que sienten. Los adultos somos los que debemos abrir este espacio de comunicación, ya que ellos aprenden del modelo de sus padres y si éstos son seres reservados, introvertidos, o les cuesta expresarse y compartir sus emociones y sentimientos, es muy probable que los hijos sigan ese mismo camino. El primer paso hacia una comunicación fluida, sana y enriquecedora con los hijos, lo deben dar los padres.