Cómo diferenciar promesas de productos de belleza falsas y reales
Los productos de belleza no siempre van acorde a las características que se ofrece en la publicidad, en muchos casos, son promesas falsas que no cumplen la expectativa despertada en las usuarias.
Los productos de belleza no siempre van acorde a las características que se ofrece en la publicidad, en muchos casos, son promesas falsas que no cumplen la expectativa despertada en las usuarias.
Encontrar una cantidad importante de productos de belleza en el mercado es bastante habitual, la cosmetología es realmente amplia, al igual que sus promesas. Existen tantas marcas de cosméticos como cantidad de estrellas en el cielo, tal vez esto últino sea una exageración, pero lo cierto es que cada vez se hace más difícil diferenciar entre un producto de buena calidad y uno falso.
Las publicidades de tales artículos pueden ser tan llamativas como sus empaques, sin embargo, no todas dicen la verdad y lo único que necesitan es vender. Qué mujer no ha caído en la trampa de las marcas que prometen eliminar las estrías, la celulitis y el acné en sus rostros, viéndose envueltas por el marketing, pero sin encontrar un resultado real a la hora de comprar esas mágicas cremas que no son más que promesas vacías.
Presentamos a continuación, una serie de consejos con base en publicaciones de la Academia Americana de Dermatología (AAD) en Estados Unidos, para saber cuáles son las posibilidades e imposibilidades que un producto cosmético puede presentar.
Antes de saber si el producto de belleza es falso o de buena calidad, es importante entender las realidades para no ser presas de las falsas promesas. Por ejemplo, no existe manera alguna de eliminar las estrías de la piel, pues estas son cicatrices dentro de ella. Sin embargo, si se encuentra un artículo que promete mejorar el aspecto de las cicatrices, es algo diferente y que sí es posible. Las cremas solo pueden ayudar a hidratar la piel, mejorando su color y textura.
La piel sí se puede rejuvenecer
Ahora bien, si se habla de exfoliantes capaces de rejuvenecer la piel, aunque suene un poco imposible, es algo real. Pues se trata de un proceso donde las células muertas son removidas de la superficie del rostro, estimulando así la regeneración celular, es decir que las células vuelvan a nacer. Así lo sostienen representantes de la AAD, quienes afirman que sí se puede hacer que la dermis, una de las capas de la piel, recupere flexibilidad y suavidad con los productos adecuados.
Continuando con la identificación de posibilidades e imposibilidades en el área de la cosmética, existen cremas que prometen eliminar de raíz la celulitis, lo que sí es algo imposible, pues no se va a lograr mágicamente con un ungüento. La piel de naranja se elimina sí, pero con tratamientos que conlleven un estilo de vida activo y una alimentación saludable. Penetrar hasta la dermis para acabar con este problema, por medio de un cosmético es realmente difícil y hasta las mejores marcas pueden prometer algo que no va a suceder.
Es por ello que solo se puede mejorar el aspecto por medio de la epidermis, parte superficial de la piel, es decir, ayudando a cambiar solo la apariencia sin que la causa de la celulitis sea resuelta completamente.
La vitamina C
Otro de los productos que pueden tener resultados positivos son los que prometen evitar la aparición temprana de arrugas en la piel por medio de ungüentos a base de vitamina C, lo que resulta beneficioso para el estado de la piel porque, generalmente, se utiliza para suavizar y provocar la elasticidad que la dermis necesita con el fin de mejorar su estado.
Para finalizar la lista de los consejos, se encuentra la mercancía que se vende como tratamiento anti manchas, esto tiene que ver con algo más delicado, pues más allá de ser un tema cosmético se trata de un tema médico.
Conocer la causa de las manchas en la piel es necesario para darnos una idea de cuál es la gravedad del asunto, y su tratamiento debe ser recetado por un médico especialista. Ello no se debe tomar a la ligera ni comprar cualquier producto que se encuentre en el mercado sin antes consultarlo con los profesionales en la materia.