Los amantes más famosos de la historia

Cleopatra y Marco Antonio; Romeo y Julieta; Juana la Loca y Felipe el Hermoso.

Los amantes famosos de la historia
Elizabeth Taylor y Richard Burton en el filme "Cleopatra" 1963

Para celebrar el día de San Valentín, 3 historias de amor que han marcado a la humanidad.

1

Cleopatra y Marco Antonio

Cleopatra era la reina de Egipto y en el 42 Antes de Cristo, conoce a Marco Antonio, un general romano enemigo, y ambos se enamoran. Pero este romance no es de todos porque pone en peligro las ambiciones políticas del Imperio Romano.

Según el historiador Plutarco, Marco Antonio:

…no estaba en posesión de sus facultades, parecía estar bajo los efectos de una droga o brujería. Estaba siempre pensando en ella, en vez de pensar en vencer a sus enemigos

En este contexto de disconformidad, Marco Antonio recibe la noticia falsa de que Cleopatra había muerto y siguiendo una promesa que se habían hecho mutuamente, que uno seguiría la muerte del otro, se suicida. Hay versiones que cuentan que Marco Antonio se mata luego de perder la batalla de Actium. La reina al enterarse del deceso de su amado, decide también entregarse a la muerte, dejándose morder por dos serpientes venenosas.

Las tumbas de los amantes fueron escondidas, según se cree por pedido de Cleopatra, que era sumamente poderosa y hasta ahora no han sido encontradas.

2

Romeo y Julieta

Si hay una pareja que simboliza el amor y más precisamente el amor con trágico destino, es la de Romeo y Julieta. Esta tragedia esecita por el dramaturgo William Shakespeare ha cautivado a millones de amantes a lo largo de toda la historia.

Una pareja de adolescentes se conoce en un baile de mascaras en Verona, Italia, y se enamoran. Pero sus familias, Montescos y Capuletos, son enemigas y se oponen al romance. Romeo y Julieta siguen adelante con su amor pese a las negativas de sus familias y él la visita cada noche en su balcón para declararle su amor.

Conscientes de la enemistad de sus familias, Romeo y Julieta deciden que el sacerdote Lorenzo los case. Pero al desconocer la boda, el padre de Julieta la quieren obligar a casarse con conde Paris. Ella desesperada acude a la iglesia y pide al sacerdote que aconseje. Éste le da una poción mágica para que beba y aparente su muerte, librándose así de la boda.

Romeo por su parte, que se había visto obligado a esconderse en Mantua tras haber matado a un Capuleto que a su vez había asesinado a un amigo suyo, retorna a Verona y al enterarse de la muerte de Julieta se suicida tomando veneno. Al despertar Julieta y enterarse de la muerte de Romeo se clava una daga en el pecho y muere.

3

Juana la Loca y Felipe el Hermoso

La atracción física entre Juana y Felipe fue inmediata, se casaron en 1496 y de inmediato ella quedó embarazada de su primogénita, Leonor. Según se dice, el nacimiento de esta niña fue la causa del cambio abrupto de Felipe, quien comienza a ser infiel con distintas damas de la Corte. Pese a las suplicas de Juana, quien estaba enterada de los deslices de su marido, Felipe sigue con sus amoríos.

Los celos de Juana se hicieron insoportables y permanentemente perseguía a su marido encontrándolo más de una vez infraganti.

En el 1500 nace finalmente el hijo varón tan deseado por Felipe, Carlos, el próximo Emperador, quien naciera en un retrete el palacio de Gante, debido a que Juana pese a su avanzado embarazo acudió a una fiesta que se celebraba allí para seguir de cerca de Felipe.

El nacimiento de Carlos y las circunstancias favorecedoras que acercan a Juana a ser la heredera de las coronas de Aragón y Castilla, mejoran la relación de la pareja y fruto de ello nace Isabel.

Cuando muere la reina de Castilla, Isabel I, queda Juana como heredera de la Corona de Castilla, pero hay una cláusula que indica que en caso de desequilibrio mental el sucesor sería D Fernando de Aragón. Esto es el comienzo de un enfrentamiento entre Felipe y el padre de Juana, lo que agrava aún más el estado de salud mental de ésta.

A Juana no le interesaba el poder, ella sólo quería ser feliz junto a su esposo y para ello que él le fuera fiel. Sin embargo, a él lo único que le interesaba era convertirse en rey, al igual que al padre de Juana.

Por ello, se enfrentan alegando ambos sus derechos de reinar producto de la incapacidad mental de Juana.

En 1507 muere Felipe en un episodio un tanto confuso, luego de beber un vaso de agua, por lo que se sospecha que lo hayan envenenado. Y el estado de Juana a partir de allí es cada vez más decadente, se sume en la depresión y su padre decide encerrarla en Tordesillas.

En 1516 muere D. Fernando y el trono queda en manos del primer hijo de Juana y Felipe, Carlos I de España, ya que éste interesado en quedarse con el reinado, deja a su madre en cautiverio.

En 1555 muere Juana la Loca, luego de 46 años de encierro, víctima de la ambición de los hombres que formaron parte de su vida: Su padre; su esposo y su hijo.