Desarrollo de un embarazo de 15 semanas
A partir de ahora se puede saber si el bebé es él o ella
A partir de ahora se puede saber si el bebé es él o ella
El feto flota placidamente en el líquido amniótico y respirarlo contribuye a desarrollar sus pulmones. Sus ojos y orejas tienen la forma y posición definitiva. Le ha crecido muchísimo el pelo en su cabeza, en sus cejas y pestañas. Es posible que mueva sus brazos y hasta sus muñecas. Se succiona el pulgar y así ejercita los músculos para cuando tenga que succionar el pecho de la madre. Su piel sigue siendo muy finita y translucida, por lo cual puede apreciarse el desarrollo de sus venas y arterias, pero comienza a engrosarse poco a poco. La mamá esta cada vez más radiante, aunque ya los kilitos comienzan a notarse. A partir de esta semana, en general, puede determinarse el sexo del bebé y la noticia es muy emocionante para toda la familia.
Edad gestacional
La edad gestacional del feto en un embarazo de 15 semanas, es de 13 semanas.
Tamaño del bebé
Su tamaño es de 4.5 pulgadas (93 a 103 mm), aproximadamente. Es decir, entre 10 y 15 centímetros.
El tamaño del feto a las 15 semanas del embarazo, es similar al de una manzana.
Peso del bebé
Su peso es de, aproximadamente, entre 50 (1.75 onzas) y 70 gramos.
Tamaño de la panza, altura uterina
Aún faltan 5 semanas para que el médico ginecólogo comience a tomar la altura uterina (distancia del hueso púbico a la parte más alta del útero). Se mide en centímetros y tiene correlación con la cantidad de semanas del embarazo.
Por ejemplo, a la semana 20, la altura uterina es de entre 18 y 20 cm. El embarazo se empieza a evidenciar ya que el útero crece y eso se nota en la parte baja del abdomen. Si bien hay mujeres que optan por no usar ropa maternal, es importante que la que usen sea cómoda, holgada y que no apriete ni su barriga, pechos, ni piernas.
Estudios aconsejados para esta altura del embarazo
En el caso de las embarazadas menores de 35 años y sin antecedentes de enfermedad cromosómica, se solicita un examen de Riesgo Sérico Materno (entre las 15 y las 21 semanas) para descartar problemas cromosómicos y espina bifida.
Síntomas en la embarazada
A esta altura del embarazo es probable que la futura mamá haya aumentado entre 2 kilos y 3 kilos, aproximadamente. Las molestias de las primeras semanas ya desaparecieron, pero puede ser que haya aparecido uno nueva, la acidez estomacal. Esto es muy molesto y frecuente en muchas embarazadas.
El desarrollo físico del bebé a las 15 semanas del embarazo
El feto crece a un ritmo impresionante. Flota placidamente entre el líquido amniótico y lo respira, lo que contribuye al desarrollo de sus pulmones. Sus ojos y orejas ya tienen la forma y posición que corresponde. Le ha crecido muchísimo el pelo en su cabeza, en sus cejas y pestañas. Es posible que mueva sus brazos y tal vez hasta sus muñecas.
Ahora se succiona el pulgar y así ejercita sus músculos para cuando tenga que tomar el pecho materno. Su piel sigue siendo muy finita y translucida, por lo cual puede apreciarse el desarrollo de sus venas y arterias, pero comienza a engrosarse poco a poco. Sus huesos se fortalecen cada vez más, su cuello se estira y su cabeza no se hunde tanto en el pecho. En muchos casos, a partir de esta semana ya se puede determinar el sexo del bebé a través de una ecografía y esta noticia alegra a toda la familia.
Complicaciones frecuentes en la semana 15 del embarazo
El riesgo de aborto espontáneo disminuye considerablemente en el segundo trimestre del embarazo. Entre las complicaciones más frecuentes en esta etapa están: problemas placentarios (placenta previa –es frecuente hasta la semana 20 del embarazo-, desprendimiento prematuro de placenta), anemia e incompetencia cervical (el cuello del útero dilata antes del término del embarazo).
Aspectos psicológicos de la madre y su entorno
A medida que avanza el embarazo y la barriga se hace evidente, la futura mamá empieza a tomar más conciencia. Algunas mujeres, no es sino hasta que ven su barriga y sienten a su bebé, que asumen su estado. Y si bien la regla general, es que a partir de estas semanas la embarazada se sienta mejor, tanto física como emocionalmente. Es posible que las fluctuaciones en sus emociones, sigan presentes durante todo el embarazo. Además, algunas mujeres durante esta etapa están más distraídas, desconcentradas, olvidadizas y eso las angustia.
Por ello, es importante que se tomen las cosas con calma, que estén tranquilas, que prioricen el embarazo ante todo. Lo fundamental ahora son la mamá y el bebé, todo lo demás es secundario.