Cibersexo

El cibersexo en una nueva modalidad que se ha desarrollado muchísimo en los últimos años, a la par de las tecnologías de comunicación virtual. El eventual anonimato que se obtiene en la red, puede ser una ventaja para aquellos que son muy tímidos, pero este mismo anonimato puede volverse peligroso, tanto para quien se oculta, como para los posibles compañeros sexuales de la red.

Cibersexo

¿Cómo funciona el sexo virtual?

Básicamente, la red brinda la posibilidad de ser cualquier persona, muchos cibernautas crean sus alter egos sin develar su verdadera identidad.
Es así que la vida virtual permite manifestar y vivir experiencias sexuales que las personas no se atreven ni siquiera a pensar.

A priori, el cibersexo parece una conducta un tanto extraña, sin embargo, las estadísticas señalan que el 83% de las personas que prefieren el cibersexo, viven vidas completamente normales, es decir que su preferencia sexual no afecta el normal desarrollo de la vida personal.

En el otro extremo encontramos un 17% de personas para quienes la práctica de sexo virtual se ha convertido en una especie de obsesión que afecta, en mayor o menor medida, otros aspectos de su vida.

Algunos profesionales se han puesto de acuerdo en clasificar a los usuarios que practican cibersexo en 5 grandes grupos:

  1. De tipo relacional
  2. Utilizan el cibersexo como un escenario más para las relaciones sexuales y eso no implica ningún problema en su vida.

  3. Por descubrimiento
  4. Se refiere a los usuarios compulsivos de Internet, quienes hacen todo por medio de la red. Estas personas podrían nunca haber desarrollado conductas sexuales poco convencionales, pero al estar todo el día en la red, son presas fáciles del cibersexo, y su compulsión por Internet se traslada rápidamente al cibersexo.

  5. Predispuesto
  6. Es a la inversa que en el caso anterior, la persona muestra tendencias sexuales extrañas e Internet sirve para que este tipo de personas puedan desarrollar sus fantasías en el anonimato, evitando la persecución social de la que seguramente han sido objeto.

  7. De tipo relacional inadecuado
  8. Más allá de que este tipo de usuario no llega a la compulsión, sí usa Internet de forma inadecuada, haciendo bromas de alto contenido sexual o comentarios inapropiados, por ejemplo, en el trabajo, o sea fuera de contexto. Esto lo hacer ver como un tanto inadaptado socialmente, no se ubica en el lugar en el que se encuentra, transformándose ante los ojos ajenos en un enfermo sexual, cuando muchas veces sólo intenta llamar la atención o verse como alguien muy divertido.

  9. Compulsivo sexual
  10. Son las personas que siempre han mostrado compulsión por la actividad sexual. En estos casos la red puede ser una forma más de expresar su compulsión, incluso hasta puede ser beneficioso, ya que sus conductas desviadas pueden sólo expresarse en este mundo virtual y alejarse del mundo real, pero también puede ser peligroso ya que la red y sus usuarios pueden ser potenciadores de los desvíos e incluso volverlos más graves y peligrosos

Podemos concluir

Si bien los estudios, al igual que la práctica sexual por Internet, son muy nuevos nos permiten deducir que le cibersexo presenta riesgos pero también ventajas.

Algunos especialistas sostienen que el cibersexo contribuye a la soledad del individuo y a volverlo más narcisista, sin hablar del peligro de volverse adicto. Se considera que dentro de los adictos a Internet, más del un 50 % son adictos al cibersexo específicamente.

Sin duda que el principal peligro es el que implica a los más pequeños, personas enfermas pueden acceder a la mente de nuestros niños contactándolos a través de Internet y ponerlos en peligro real.

Pero también se considera al cibersexo como un disparador de actitudes más libres que para algunas personas en extremo tímidas, puede ser una terapia para alejar temores y poder lograr una vida sexual activa y saludable en el plano de la realidad.