Favorecer la buena relación entre hermanos: Segunda parte

La posición del hermano del medio puede ser conflictiva y los padres tienen que dedicarle una atención especial para que encuentre su lugar en la familia

Hermanos

Continuando con la entrega de favorecer la buena relación entre hermanos? la segunda parte:

El benjamín

Desde el comienzo es el centro de la atención y el cariño de toda la familia. Sus padres enfrentan su crianza y educación mucho más relajadamente que con el primogénito y esto sin dudas ejerce una influencia en las pautas que se manejan en su crianza y en el tipo de relación que se establece.

Él con su sola presencia, enseña a su hermano mayor a compartir, negociar y en varias oportunidades a ceder. Así como a desarrollar una mayor tolerancia a la frustración. Además el mayor aprende al tener un hermano menor, a velar por los más desprotegidos y vulnerables.

A diferencia del primogénito, el benjamín desde su nacimiento comparte y convive con niños, esto hace la relación con sus pares se desarrolle mucho más naturalmente, ayudando incluso a una adquisición más temprana del lenguaje fluido.

¿A qué se enfrenta el benjamín?

El benjamín deberá lidiar con los celos de sus hermanos y también aprender a tolerar los propios. Como se sobreentiende que es el más desprotegido, los padres tienen a sobreprotegerlo en demasía, incluso, ante sus hermanos; lo cual puede llevar a que la tolerancia a la frustración sea baja y sea muy dependiente de los demás para todo.

¿Cómo tratar al benjamín?

De igual manera que con el primogénito, el menor debe sentirse especial por su posición en la familia y disfrutar de ello. Su lugar, es muy envidiado por los hermanos mayores, quienes desearán muchas veces volver a ser pequeñitos.

Las rabietas y berrinches por no poder hacer las mismas cosas que sus hermanos mayores son frecuentes en el benjamín y dependerá de los padres manejar esta situación; frenar sus ganas de ir más rápido que el tiempo, de quemar etapas. Para ello, es importante que puedan explicarle que cada etapa en la vida es importante, que cada edad tiene sus encantos y ofrecerle cosas, alternativas, responsabilidades propias para su edad.

El del medio

Ser el hermano del medio tiene sus ventajas y sus desventajas, como casi todo en la vida. Se tiene mayor libertad que el primero, quien ya ha despejado el camino, pero pierde su lugar del menor con la llegada del benjamín y los privilegios que ello conlleva.

El del medio enseña a su hermano mayor a repartir su atención entre él y el benjamín y al menor a repartir su admiración entre el mayor y él.

Él a su vez aprende de sus hermanos también; seguirá los pasos del mayor, aunque con mayor libertad por el camino abierto por éste y del menor lo lindo que es que alguien te admire, te idolatre, lo cual reforzará su autoestima.

¿A qué se enfrenta el del medio?

Su posición de medio puede ser conflictiva y costarle encontrar un lugar de reconocimiento en la familia. Pueden aparecer celos del trato que reciben sus hermanos: Le mayor muchas libertades y el menor muchos mimos.

¿Cómo tratar al del medio?

La posición del hijo del medio no es tan clara como la del primogénito y la del benjamín. Por ello, los padres deben tener especial cuidado en hacerlo sentir especial en su lugar y reconocerlo.

Dedicarle todos los días una atención especial, un rato sólo para él y de tanto en tanto llevarlo de paseo sólo a él, sin sus hermanos.