Infección urinaria en el embarazo

Los controles periódicos y la realización de los análisis y exámenes de rutina son la mejor forma de prevención

infeccion urinaria en el embarazo
Foto cortesía de dizznbonn - Flickr.com

La infección urinaria en el embarazo es una de las complicaciones más frecuentes en este período. Se presenta aproximadamente en un cinco o un diez por ciento de los mismos. En esta etapa se producen modificaciones hormonales, anatómicas y funcionales, que incrementan el riesgo de que la mujer padezca esta patología, ya que se crea un campo más propicio para que las bacterias se dirijan desde los uréteres a los riñones. Si no se trata a tiempo y correctamente, puede complicar mucho tanto a la madre como al bebé, incluso provocarles la muerte.

¿Por qué se produce la infección urinaria?

Los factores que la provocan son múltiples y pueden actuar aislada o conjuntamente.

  • Crecimiento del útero que comprime los uréteres, hace más lento el paso de la orina, lo que favorece la aparición de bacterias y la infección
  • Aumento en los niveles de progesterona
  • Estreñimiento
  • Infecciones genitales
  • Cálculos renales
  • Enfermedades renales crónicas/li>
  • Anomalías en las vías urinarias

¿Cuáles son los síntomas de la infección urinaria?

  1. Síntomas urinarios altos
  • Dolor en la zona lumbar
  • Fiebre, escalofríos, sudoración
  • Síntomas digestivos (náuseas, vómitos)
  • Síntomas urinarios bajos
    • Dificultad al orinar
    • Ardor o dolor al orinar
    • Ganas de orinar y no poder
    • Orinar y continuar teniendo ganas
    • Orinar varias veces muy poca cantidad
    • Orinas turbias y con olor fuerte
    • Orinas sanguinolentas
    • Dolor en las relaciones sexuales

    Complicaciones que puede causar la infección urinaria en el embarazo

    1. A la madre
    • Riesgo de parto prematuro
    • Anemia
    • Infección extendida
  • Al feto
    • Riesgo de nacimiento prematuro
    • El RCIU (Enlentecimiento del crecimiento fetal)
    • La muerte, sobre todo cuando la madre hace picos de fiebre muy alta

    De estos datos se desprende que siempre que en un embarazo exista amenaza de parto prematuro, se debe realizar un análisis de orina para descartar una infección urinaria.

    ¿Cómo se diagnóstica la infección urinaria

    El diagnóstico se realiza en primer lugar por los signos y síntomas de la embarazada y para confirmarlo se realizan exámenes clínicos: Orina, urocultivo y antibiograma. Pero como muchísimas veces la infección pude presentarse asintomática, los análisis de sangre y orina forman parte de los exámenes de rutina del embarazo.

    Tratamiento

    • Una vez confirmado el diagnóstico y cuál es el germen causante de la infección, se debe tratar con el medicamento apropiado
    • El tratamiento puede realizarse en domicilio, pero en algunas ocasiones requiere internación
    • Además de la medicación, se deben mejorar algunos hábitos: Consumir más alimentos ricos en fibra para evitar el estreñimiento en el embarazo y tomar mucho líquido
    • Pasados diez días de que se terminó el tratamiento, se recomienda realizar un nuevo examen de orina y urocultivo de control

    Los controles en el embarazo y la visita periódica al ginecólogo, son la mejor forma de prevenir y evitar posibles complicaciones producto de una infección urinaria no diagnosticada y tratada a tiempo.