Cerclaje Cervical

Se trata de un procedimiento que logra el efecto de cerrar la apertura existente en el cuello uterino. La técnica impide un posible aborto

Algunos trastornos en el cuello uterino pueden provocar amenaza de aborto. Si éste se halla ligeramente abierto, hay que acudir a un procedimiento que ayude a cerrarlo. Esta técnica se denomina Cerclaje Cervical y existen tres tipos diferentes.

Tipos:

  • McDonald: Los puntos se ejercen en forma de cadena. Se efectúan en la semana 12 a la 16 y se remueven a las 37 semanas de gestación
  • Shirodkar: Las suturas pasan a través del cuello del útero. Es una técnica menos común y más difícil técnicamente de ejecutar que el McDonald
  • Abdominal: Este procedimiento implica el suturar dentro del abdomen. Es la práctica que menos se utiliza ya que es permanente. Solamente es válido si el cuello uterino es muy corto y no permite ningún otro tipo de cerclaje temporal

Causas por las cuales se puede necesitar esta operación:

  • Haber tenido alguna operación del cuello uterino
  • Debilitamiento hereditario del cerviz
  • Malformaciones de los genitales (útero bicorne, septo o doble)

¿Cómo se diagnostica?

En general la condición de incompetencia cervical se diagnostica una vez se han atravesado traumatismos como abortos recurrentes. Las pruebas que detectan esta condición pueden ser:

  1. Introducción en el interior del cervix de los tallos de Hegar (cilindros metálicos). Si el tallo de 8mm pasa fácilmente por el canal cervical sin producir dolor, se dice que el cervix es incompetente
  2. La resonancia magnética nuclear (MNR) también facilita el diagnóstico
  3. La ecografía transvaginal contribuye a detectar la anomalía, ya que una longitud cervical menor de 2cms es considerada anormal

Tratamiento:

  • Consiste en una fuerte sutura durante la primera etapa del embarazo. Generalmente se efectúa entre las 12 y 14 semanas
  • Cuando el embarazo está por finalizar, se remueven los puntos

Datos interesantes:

  1. El cerclaje es efectivo en el 80-90 por ciento de los casos
  2. El 1-9 por ciento de las mujeres experimentan un parto prematuro después de la intervención
  3. Según la Organización Mundial de la Salud, (OMS), la incidencia de parto prematuro es del 5 por ciento en países desarrollados y del 25 por ciento en los sitios en desarrollo

Riesgos:

Aunque la operación es segura en la mayoría de los casos, existen algunos peligros que es mejor tenerlos en cuenta:

  • Daño en el cuello uterino
  • Lesión en la vejiga
  • Sangrado
  • Infección uterina
  • Trabajo de parto antes de tiempo
  • Ruptura de membrana prematura
  • Infección del saco amniótico
  • Ruptura cervical

¿Existen otras alternativas a la cirugía?

  • Reposo absoluto
  • Consumo de medicinas uteroinhibidores

Estas opciones deben ser evaluadas por un profesional, que indicará si es suficiente con el descanso, o se necesita recurrir a la intervención para no correr riesgos.

A tener en cuenta:

  1. El cerclaje cervical se debe realizar solamente en casos de antecedentes de aborto y cuando se comprueba que el cuello uterino es inviable, ya que el riesgo de aborto existe
  2. El haber tenido un cerclaje no determina que no se pueda tener un parto natural
  3. La intervención requiere de hospitalización y anestesia

Recomendaciones:

  • Luego de la intervención se debe hacer todo el reposo que se pueda ya que las posibilidades de que se adelante el parto son muchas
  • Se debe consultar al médico, si es conveniente tras la operación ingerir alguna medicación. Ya que en algunos casos los especialistas indican luego de colocar el cerclaje, la administración de progesterona u antibióticos para prevenir la aparición de contracciones e infecciones