Vínculo intrauterino madre-hijo: Segunda parte

Cuando la mamá como hábito juega con él a acariciarse la panza y él se mueve, espera diariamente esta cita

Vida intrauterina

Continuando con la entrega de los que aprende el feto dentro del útero de su mamá: La segunda parte.

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Lo que aprende el feto dentro del útero cuando su mamá cambia de posición

Aproximadamente en el octavo mes del embarazo, cuando su madre cambia bruscamente de posición puede sentir que su bebé se mueve dentro del útero como consecuencia del reflejo Moro. Este reflejo se caracteriza porque el niño extiende sus brazos y piernas de manera súbita al experimentar un movimiento brusco o un susto. Es un indicio de que está aprendiendo a ponerse en marcha y demuestra que su desarrollo neurológico es normal. Para favorecer y estimular este reflejo, cambiar de posición de tanto en tanto.

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Lo que aprende el feto dentro del útero cuando su mamá escucha música

El bebé recibe los estímulos sonoros que le llegan del exterior y los reconoce. Boris Brott, el famoso director de orquesta canadiense, director de la Philharmonic Symphony de Ontario, contó que se sorprendió al reconocer partituras que nunca antes había visto y luego descubrió que eran piezas que su madre había tocado estando embarazada. Al escoger qué tipo de música escuchar, es importe tener en cuenta que compositores como Vivaldi o Bach relajan al bebé, dado que su ritmo es muy similar al de corazón humano, mientras otros como Beethoven lo alteran.

Determinados hábitos que estimulan y favorecen el vínculo madre-hijo:

  • Acariciar la panza
  • Esto es algo que casi por instinto suelen hacer la mayoría de las mujeres embarazadas. Es de suma importancia, ya que el tacto es el primer sentido que desarrollará el bebé dentro del útero y desde el cuarto mes sentirá la mano de su madre cuando acaricie su barriga.

  • Cantarle
  • Cantarle canciones de cuna es otra de las cosas que ayuda desde la vida intrauterina a afianzar el vínculo madre-hijo. Al escucharlas el se mueve dentro del útero, auque es probable que la madre no lo note o no todo el tiempo. En caso de que la mamá los perciba, puede hacer la siguiente prueba pasado el tercer trimestre que es cuando ya formó su órgano auditivo: Repetir sobre la barriga los mismos ritmos y es muy probable que el bebé los repita.

Las caricias en la panza, las charlas y canciones de mamá al bebé, fortalecen mucho el vínculo desde antes del nacimiento. Si la mamá a partir del séptimo mes, diariamente a la misma hora le canta y acaricia, él esperará esa cita para moverse al compás de los movimientos maternos.