Las reinas más populares de la historia: Primera Parte
Cleopatra, Victoria, Isabel II…
Cleopatra, Victoria, Isabel II…
Fueron unas cuantas las mujeres que a los largo de la historia alcanzaron el poder, sin embargo, muy pocas las que consiguieron popularidad. Algunas amadas y otras odiadas, por sus decisiones, por su manera de vivir, sus escándalos, etc. Es así que hay figuras reales de los siglos pasados que han adquirido tal notoriedad en su momento, que hasta hoy se traen sus nombres ya sea en cine, literatura, teatro y en las más diversas manifestaciones artísticas.
Cleopatra
La última reina del Antiguo Egipto asumió el reinado a los 18 años y fue la reina durante en período Helenístico. Se la recuerda por sus romances con Julio Cesar y Marco Antonio y por su gran poder de seducción aunque no le funcionó con Octavio. Al advertir un futuro como prisionera de Octavio en un reinado en el cual habría sido ella la soberana, decidió suicidarse según la versión más extendida de la historia, pidiendo a sus empleadas una canasta de frutas con una cobra egipcia dentro. Dejó una carta en la que pedía ser enterrada junto a Marco Antonio, deseo que fue cumplido.
Victoria
Reinó Inglaterra por 64 años, desde 1837 hasta 1901 y este período es conocido como época victoriana, el reinado más largo en toda la historia de inglaterra. Llegó al trono con tan sólo 18 años y lo ocupó hasta su muerte. En 1840 contrajo matrimonio con el príncipe Alberto de Sajonia-Coburgo-Gotha y tuvo 9 hijos y 42 nietos, 26 de los cuales se casaron a su vez con otros miembros de la realeza, lo que le valió a Victoria el apodo de abuela de Europa.
Isabel II
Ocupó el reinado desde 1833 y 1868 y fue la única soberana consorte. Se casó a los 16 años por arreglo de familias con su primo el infante Francisco de Asís de Borbón, duque de Cádiz y su matrimonio fracasó según dicen porque a él no le gustaban las mujeres. El reinado de Isabel fue bastante convulsionado política y socialmente y de hecho tras la Revolución de La Gloriosa acabó exiliándose en Francia, donde fue amparada por Napoleón III. Desde que su derrocamiento en 1868 dejó de vivir en pareja con su marido y ella murió en París en 1904 y fue enterrada en Monasterio de El Escorial junto con su esposo muerto en 1885.
Catalina la Grande
Fue la emperatriz de Rusia por 34 años hasta que murió en 1762. Desde que se casó con Pedro III de Rusia pasó a llamarse Catalina, pero su nombre era Sofía. Si bien no tenía una buena relación con su marido y no consumaron el matrimonio durante 12 años, logró conquistar a su suegra y con su ayuda derrocar tras un golpe de estado en 1762 a Pedro sustituyéndolo en el trono. Su vida amorosa fue bastante convulsiva, era famosa por acomodar a sus amantes en cargos de poder y por obsequiarle títulos y propiedades. El gran amor de su vida fue el príncipe Grigori Potiomkin quien la apoyó políticamente.
María Antonieta
Era la archiduquesa de Austria hasta que se casó con el rey Luis XVI de Francia, cuando se transformó en la reina consorte de Francia. María Antonieta no contaba con la aprobación del pueblo ni de la corte porque la consideraban promiscua y manipuladora de su marido a favor de Austria. En 1792 Luis XVI fue depuesto y ejecutado, la monarquía abolida y María Antonieta guillotinada.