Pescados que las embarazadas no deben consumir
Si bien el pescado es un excelente alimento para incluir en la dieta, las mujeres embarazadas deben tener algunas precauciones a la hora de consumir algunos tipos, ya que pueden contener mercurio.
Si bien el pescado es un excelente alimento para incluir en la dieta, las mujeres embarazadas deben tener algunas precauciones a la hora de consumir algunos tipos, ya que pueden contener mercurio.
El pescado y los mariscos constituyen un alimento fundamental en cualquier dieta, debido a su gran aporte de ácidos grasos Omega 3, a que son muy buenos para prevenir las enfermedades cardiovasculares, una fuente súper importante de proteínas y bajos en grasas saturadas.
Sin duda que es un ingrediente fundamental en la alimentación de una embarazada, cuyos requerimientos nutricionales son más grandes. Sin embargo, prácticamente todos los tipos de pescados y mariscos contienen algún resto de mercurio, un metal que también puede estar presente en el aire por la contaminación ambiental y puede resultar muy nocivo para un feto en desarrollo e incluso si es consumido antes de la concepción.
Si bien el mercurio es eliminado naturalmente por el organismo, este proceso lleva su tiempo y puede tardar hasta un año para que los niveles bajen hasta los aceptables. Por esto es que las mujeres que planeen quedar embarazadas también deberían cuidarse, ya que elevados niveles de mercurio pueden estar acumulados dentro del organismo cuando queda embarazada.
La principal vía de ingreso del mercurio al organismo, es a través del pescado que consumimos. Si bien sólo los elevados niveles de mercurio son dañinos para la salud del bebé, es preciso que tanto mujeres embarazadas, mujeres que están amamantando y aquellas en edad fértil que pretenden ser madres, regulen el tipo y la cantidad de pescado que comen.
Eliminar por completo de la dieta de la embarazada el pescado y los mariscos sería un error en vista de los múltiples beneficios que tienen, lo mejor es detallar cuáles son los pescados permitidos y los que no, en esta etapa tan importante de la vida de una mujer.
La Administración de Alimentos y Drogas (FDA) y la Agencia de Protección Ambiental (EPA) de Estados Unidos recomiendan lo siguiente:
No comer
- Tiburón
- Pez espada
- Blanquillo
- Mariscos ahumados o secos, arenque
- Mariscos (ostras, almejas) o pescados crudos (sushi)
- Caballa rey
Comer no más de una porción semanal de (alrededor de 6 onzas)
- Atún blanco
- Conservas de atún
- Filetes de atún
- Pargo
- Halibut
- Palitos de pescado (fish sticks)
Comer no más de dos porciones semanales de (alrededor de12 onzas)
- Salmón
- Atún en conservas bajas calorías
- Bagre
- Carbonero
- Bacalao
- Almejas, camarón, ostras, cangrejo, vieiras
Otras sugerencias
- Si se tiene dudas acerca de determinado tipo de pescado, no consumirlo o comer tan sólo una porción a la semana (6 onzas), cuidando de no comer ningún otro tipo durante la misma
- Comprar siempre pescado fresco, en lugares seguros y de confianza. Solicitar al vendedor la sugerencia de pecados jóvenes, pequeños y lo más magro posibles
Si bien la mayoría de los pescados tienen algún resto de mercurio, los más grandes que han vivido por más tiempo, tienen más probabilidades de contener niveles más elevados de mercurio, porque han tenido mayor tiempo para almacenarlo. Mientras los pescados más pequeños y jóvenes, así como los mariscos pueden ser consumidos moderadamente, teniendo en cuenta las recomendaciones anteriormente citadas de la Administración de Alimentos y Drogas (FDA) y la Agencia de Protección Ambiental (EPA).